“Sólo se ficharon dos jugadores de mi lista y diez de la del director”
El técnico concede una entrevista AS en la que desvela que el proyecto que él presentó al Getafe nada tiene que ver con el que hizo Ramón Planes.
Dos semanas después de haber sido destituido, Quique Sánchez Flores concede una entrevista a AS en la que desentraña las razones de la mala temporada del Getafe: una pésima planificación, fichajes no deseados, poca o nula relación con la dirección deportiva... Que mantiene su amistad con Ángel Torres, que no había relación con Planes, que siempre será un seguidor más del Getafe y que estos días ya ha recibido ofertas para volver a entrenar.
-Partido Real Madrid-Getafe, ¿con cuál va?
-Getafe.
-A pesar de haber sido jugador del Madrid….
-Sí, porque el Madrid no tiene objetivo alguno ya en Liga y el Getafe, en cambio, uno muy importante: quedarse en Primera.
-Al Madrid este partido le pilla entre las dos batallas con el City, ¿cree que se dejará llevar y saldrá a medio gas?
-El Madrid siempre tiene la cosa de querer ganar, pero creo que va a haber controversia con la alineación porque, seguramente, sea un equipo alejado del once ideal. Es una buena oportunidad para el Getafe.
-¿Qué le pareció el Madrid-City?
-Me encantó. Se jugó desde el respeto. Ninguno se soltó del todo. Los dos tenían en la retaguardia el miedo de ‘me van a correr, me van a meter un ataque rápido’ y jugaron con el freno de mano echado. Me pareció un partido soberbio, acciones de ataque con diagonales magníficas al pie y con acciones defensivas brutales. Un partido de altísimo nivel.
-¿Ancelotti o Guardiola?
-Me quedo con la convicción de ambos. Lo que más me gusta de un entrenador es la convicción. Me quedo con la gestión grupal de Ancelotti, incluyendo personas y jugadores. Y con Guardiola me quedo, lógicamente, con la convicción que tiene para desarrollar su fútbol.
-El Madrid, ¿otra vez campeón de Europa?
-Podría ser. Cuando ves al Madrid en semifinales tienes que empezar a pensar que puede ser el campeón.
-¿Qué debe hacer el Madrid para salir airoso del Etihad Stadium?
-Ser ellos mismos. Lo más grandioso que tiene el Madrid es que no cambia de piel. Da igual a dónde vaya a jugar, a quién se enfrente, la competición… ellos no mudan.
-A Haaland se le para… ¿cómo?
-A Haaland se le para estando atentos a Haaland. Ya le pararon el otro día. Es un jugador que necesita poco para hacer gol, para crearse un espacio. Haaland es un cañón con cuatro pistoleros detrás: Bernardo Silva, De Bruyne, Grealish… Si tienes controlado eso tienes mucho adelantado.
-En el partido del Bernabéu no brillaron ninguno de los dos 9, ni Benzema ni Haaland…
-Sí, porque el partido no estuvo en la punta, ni tampoco mucho en tres cuartos, el partido estuvo mucho en el mediocampo.
-Usted, que estuvo en Inglaterra entrenando al Watford en dos ocasiones, ¿opina que la Premier tiene más nivel que LaLiga o al revés?
-La diferencia está en la velocidad del juego y en el físico. Si los ingleses vienen a jugar a España se cansan de perseguir al rival. Aquí el fútbol es más lento pero, a la vez, se juega más con la pelota, se da más tiempo hasta llegar al gol. En cambio, en la Premier están continuamente en transición, en idas y vueltas, en las dos áreas.
-¿Cuál le gusta más?
-Al máximo nivel me gustan los dos. En el medio y bajo nivel es mejor el inglés.
-¿Ha digerido ya su reciente destitución en el Getafe?
-Sí. En el fondo, somos artistas. Te pueden cancelar una serie, o no triunfar una película o no funcionar una canción, pero el artista sigue. Hay que remontar y volverse a poner de pie y, sobre todo, tener la convicción de que lo que hicimos hace un año (salvar al Getafe) fue muy bueno.
-¿Qué falló?
El proyecto fue totalmente distinto del que yo pensaba cuando firmé la renovación. Imaginaba un proyecto muy diferente a lo que ha sido.
-¿Le prometieron algo muy diferente?
-No es cuestión de promesas, es una cuestión de identidad. Cuando uno hace la gesta que hicimos la temporada anterior (coger al Getafe con un punto en la jornada 8 y salvarlo), que incluso fuimos felicitados por el Crystal Palace, que era el único equipo que había hecho lo mismo a lo largo de la historia del fútbol, lo mínimo que uno espera es que se ponga al servicio de ese equipo técnico algo que vaya en común con las ideas del entrenador, y ha distado mucho. Hemos estado toda la temporada con dificultades.
-Su relación con Ángel Torres es de amistad, ¿cómo era su relación con Ramón Planes, director general?
-Bueno, digamos que no ha habido una excelente comunicación. Lamentablemente. Lo ideal sería lo contrario: tener buena sintonía.
-¿Quién o quiénes hicieron la plantilla del Getafe 2022-23?
-La plantilla se alejó muchísimo de lo que nosotros proponíamos. Cuando acabo las temporadas presento un report (informe) a la dirección deportiva y al presidente para que sepan cuáles son nuestras debilidades y dónde se puede mejorar la plantilla. Al final, la hoja de ruta fue otra completamente diferente a la que yo presenté. Yo quería continuidad de lo que terminó el año anterior, pero me vaciaron el centro del campo y me llenaron de delanteros. Ahí empiezan a complicarse las cosas.
-¿En qué momento vio que el proyecto podía peligrar?
-En pretemporada. Sólo tenía a nueve jugadores del primer equipo y a 15 de la cantera. Fuimos el peor equipo de la pretemporada: juegas contra el Elche, pierdes y eres peor; juegas contra el Albacete y pierdes 1-0 siendo peor; juegas contra el Cartagena, empatas y eres peor; juegas contra el Leganés, pierdes 2-0 y eres peor. No teníamos equipo, pero decían que era mejor esperar a fichar al final del mercado, a últimos de agosto, porque es más barato. Claro, y también cuando ya queda poco o nada. Al final, cuando se ficha ya se han jugado dos jornadas. El resultado fue que sólo hicimos un punto en las cuatro primeras jornadas, mientras Osasuna, por ejemplo, tenía 9. El Rayo no sé cuántos puntos también y ya eran equipos trabajados. A ver cómo les recuperas ahora esos puntos.
-¿Ficharon a alguno de los jugadores que usted pidió?
-Se firmaron sólo a dos jugadores de mi lista pero a 10 de la lista del director.
-Planes le señaló públicamente diciendo que había equipo para estar más arriba….
-Sí, sí. Es importante que, para que todo fluya, un entrenador deba influir, pero cuando tú intentas influir y por el otro lado al grupo le está entrando un mensaje completamente diferente, pues eso distorsiona mucho. El relato de dentro del club era distinto al del entrenador. Y esto ha pasado durante toda la temporada. Me hubiera gustado que hubiera más humildad, pero eso de poner a los jugadores y al club en unos objetivos hiperaltos…. ¡Pero si no se sabía siquiera cuál iba a ser el rendimiento! Así es difícil, por no decir imposible.
-¿Por qué, tras el Mundial, no podía alinear a Maksimovic? Se dijo que el club quería vender al futbolista y él no quería, y la versión contraria.
-Todavía no sé cuál fue el motivo. Fui varias veces a las oficinas para que me explicaran la situación, pero nunca supieron explicármela, y el jugador estaba tan confuso como yo. Tanto, que el jugador se declaró no apto para jugar. No quería que afectara a sus compañeros.
-Situación incómoda para el entrenador, que se ve en medio de dos trincheras…
-Situación incómoda que se crea de forma increíble, no entiendo cómo se puede llegar a ese punto. ¿Qué se hizo para que un jugador no encuentre la motivación para jugar?
-¿Fue cosa del presidente o de Planes?
-No lo sé.
-¿Cómo es Ángel Torres en esas distancias tan cortas?
-Es un buen hombre, buena gente, se merece lo mejor. Merece que las cosas le vayan bien, pero debe volver a su intuición. El mejor Ángel Torres siempre ha funcionado desde las tripas, no desde la cabeza. Como otras muchas personas, entre las que me incluyo.
-¿Qué hace un entrenador al día siguiente de ser destituido? Se levanta, desayuna y...
-Descanso, aprovecho mi tiempo, disfruto de la vida. Tengo muchas aficiones: me gusta mucho leer, documentarme, ver películas… Me gusta mucho ver a mis hijos, pasear. Y, además, me siento un afortunado porque, cuando sales de un equipo, empieza a sonar el teléfono para posibles situaciones de irse a otro.
-¿Le han llamado ya para entrenar?
-Sí. He recibido llamadas interesantes, pero lo que tengo que hacer ahora es tener un poco de reposo.
-Curiosamente, ahora en el Getafe no están ni Quique Flores ni Ramón Planes. Y Torres recurre a Bordalás. ¿Ha visto los dos últimos partidos del Getafe, con Bordalás?
-En el primer partido se pareció mucho a lo que hacíamos nosotros y en el segundo (victoria contra el Celta, 1-0) me di cuenta de que no había ningún fichaje de este año en el once titular. Me encantó el mensaje que envió Bordalás. Es un movimiento que yo no podría haber hecho, porque durante toda la temporada fui señalado por no sacarle rendimiento a la gran cantidad de fichajes que se hicieron. Si yo hubiese hecho eso, al día siguiente me despiden acusado de atentar contra los intereses del club.
-Ha entrenado al Getafe tres veces, ¿lo haría una cuarta?
-Nunca puedes decir nunca jamás.
-Equivocadamente, la gente piensa que fue el Cholo Simeone quien cambió la historia del Atlético, pero quien de verdad dio ese giro fue usted, que la temporada anterior hizo ganar al Atlético un título europeo (Europa League) 48 años después.
-La historia la ha cambiado el Cholo, pero es cierto que el propio Simeone ha estado muy amable reconociendo públicamente que yo le di un giro al club. Cambiamos la tendencia.
-Ha entrenado en España, Inglaterra, Portugal, Dubai… ¿Qué le falta como entrenador?
-Me falta recuperar la dirección de equipos que peleen por algo importante.
-Usted, qué jugó con España, ¿se ve como seleccionador nacional?
-Bueno, en cualquier momento podría ser. Debe ser de lo más agradecido.
-Todo el mundo sabe que usted es sobrino de Lola Flores. En cambio, no todo el mundo conoce que usted es hijo del que fuera un gran jugador del Real Madrid, Isidro Sánchez, quien ganara cuatro ligas con el Madrid de Di Stéfano.
-Me gustaría que no se olviden de él porque mi padre, aparte de futbolista de élite, nos dio una lección de vida. A los 38 o 39 años se quedó casi ciego, pero nos dio una lección de humildad, de nunca quejarse de nada, tenía un temple… Vivió hasta los 76 años.
-Por cierto, ¿cómo le gusta que le llamen: Quique Flores, Quique Sánchez Flores o Quique, a secas?
Menos Enrique, que creo que no me lo llama nadie, jajaja, me vale cualquier cosa. Cuando empecé a jugar en la selección Sub-18 me pusieron Sánchez. Yo estaba entonces en el Pegaso, en Tercera División, y me dijeron, ‘bueno tendrás que ponerte un nombre ¿Ponemos Quique?’. Y dije, venga, y ya fui Quique en el Pegaso y en la Sub-18, pero cuando debuté en Primera estaban Quique Ramos, Quique Setién… Entonces, José María García me puso de apodo ‘El Faraón’ (su tía Lola era llamada ‘La Faraona’), y empezó a llamarme Quique Flores ‘El Faraón’. Yo no quería quitar de en medio a mi padre y dije: si me ponéis apellido me ponéis los dos.