Socavón en el mediocampo
Fran Beltrán y Renato Tapia atraviesan por su peor momento como celestes. El pivote es ahora mismo el puesto más frágil de la plantilla olívica
La llegada de Carlos Carvalhal en noviembre sirvió para aumentar el nivel del equipo en todas las posiciones. Todas menos una. La excepción que confirma la regla es el puesto de pivote, donde Fran Beltrán y Renato Tapia están muy por debajo de su rendimiento medio. Tanto el madrileño como el peruano están firmando una temporada para olvidar, con errores de bulto que han condenado a su equipo en más de una ocasión. Ninguno de los dos está rindiendo al nivel esperado, lo que hace que el puesto de pivote sea el más frágil de la plantilla en estos momentos.
Los dos últimos partidos sirven como ejemplo del mal momento que viven los mediocentros. Tapia cometió un fallo garrafal ante el Atlético que le costó la derrota al Celta en el último minuto. El peruano jugó ante los rojiblancos como central y dio la talla. Hasta que llegó esa jugada que le condena definitivamente. Beltrán por su parte aparece como culpable en el gol recibido en Anoeta, con una pérdida imperdonable que constituye la contra realista hasta acabar en gol, aunque bien es cierto que Iván Villar también falla porque el disparo de Oyarzabal entra por su palo.
La pérdida en el gol a los cinco minutos fue una losa que Fran Beltrán no consiguió levantar durante el partido. Pese a que recurrió a los pases de seguridad, algo que hace frecuentemente, estuvo más impreciso de lo habitual. Tras una pérdida en un pase fácil, Carvalhal decidió sustituirlo para dar entrada a Renato Tapia. Fue peor el remedio que la enfermedad. Porque el peruano únicamente duró siete minutos sobre el terreno de juego después de ver dos amarillas en la misma jugada: primero por hacer una falta y después por protestar. Para más inri, el colegiado Ortiz Arias reflejó en el acta del partido que Tapia se dirigió a él en los siguientes términos: “¡Qué prepotencia!”. La controvertida decisión del árbitro le costará, como mínimo, un partido de sanción.
El bajo estado de forma de Fran Beltrán y Renato Tapia no ha tenido de momento mayores consecuencias a nivel técnico, aunque Carvalhal ya ha demostrado en otros clubes que no le tiembla el pulso a la hora de apostar por la cantera. El entrenador portugués ya ha manifestado su grata sorpresa después de ver entrenar a Hugo Sotelo con el primer equipo. De la misma añada, 2003, es otro talento forjado en A Madroa que actúa de mediocentro: Damián Rodríguez. Quizás la solución al mal momento de Beltrán y Tapia esté en la cantera.