Sergio Ramos se cierra las puertas del Sevilla definitivamente
La afición nervionense no perdona el cierre parcial del Sánchez-Pizjuán por los cánticos contra el camero en 2017 y Gol Norte volvió a cargar contra él ante el Celta.
Dos lonas cubrían durante el Sevilla-Celta los sectores N11 y N12 del Gol Norte del Sánchez Pizjuán. Los aproximadamente 600 aficionados que debían situarse en ese sitio se quedaban sin visionar el encuentro debido a unos cánticos contra Sergio Ramos de hace más de seis años, durante un Sevilla-Real Madrid de vuelta copera en los que los merengues eliminaron a los nervionenses con el camero como bigoleador. Pero los Biris, facción ultra que se sitúa precisamente en esa grada, volvieron a entonar cánticos dedicados al ahora central del PSG: “Sergio Ramos, hijo de p...”.
Presumiblemente, los informadores de Antiviolencia reflejarán de nuevo ante al Comité de Competición estos últimos insultos contra Ramos. Porque aunque él no tenga nada que ver con el cierre, buena parte del sevillismo ya no perdona. Y eso le cierra de manera definitiva las puertas a un posible final de carrera en el Sevilla. La afición se dividía con la posibilidad de que Sergio, que ha vuelto a jugar a un nivel tremendo en los últimos meses, pudiera terminar su carrera en el sitio que le catapultó al Real Madrid y el gran fútbol. Si existía alguna exigua ocasion, ésta ha quedado dilapidada por los últimos acontecimientos.
Con una oferta económicamente estratosférica del Al Hilal de Arabia Saudí, que según pudo saber AS llegaría hasta los cincuenta millones netos por temporada, el defensa sevillano anda enfrascado ahora mismo en la renovación con el PSG, donde cobra y seguiría cobrando un sueldo que en todo caso se sale de los parámetros que le podrían ofrecer en Nervión. En todo caso, con una deuda importante, la necesidad de aliviar la masa salarial de su plantilla y el hecho de que muy probablemente no jugará Europa el año que viene, el Sevilla tampoco podrá afrontar contrataciones de ese calado.