Sergi Cardona gana el pulso
Las Palmas lo tenía vendido al Olympiakos pero no quiso irse. Vuelve a ser indiscutible. “Con lo que costó el ascenso, tenía ganas de seguir”, insiste.
Casi siempre, acaso con una efectividad tan cercana al 100%, los futbolistas acaban jugando donde quieren o más les interesa. Que no siempre es lo mismo. Es el caso de Sergi Cardona, paradoja la suya, válidas en este caso ambas opciones. Por ser, fue uno de los futbolistas más apetecibles de Las Palmas en el reciente mercado estival. Venía de ser el jugador más utilizado por su entrenador, 3.129 minutos en 39 partidos, siendo desde luego una pieza capital en el regreso a Primera División cinco años después.
Acabando contrato el próximo verano, situación que se mantiene, los despachos de la UD optaron por hacer caja con él. Tanto es así que tenían cerrada su venta al Olympiakos, mas el pibe se negó. Al final, Las Palmas no engordó su cuenta corriente y Cardona, tan feliz, seguirá jugando en Gran Canaria. “Con lo que nos había costado conseguir el ascenso, tenía ganas de seguir aquí y en Primera División”, confesaba este jueves en sala de prensa este espigado lateral izquierdo catalán.
Resulta que el club le ofreció un pulso, bien parecido a una emboscada, exposición pública de una negociación que no le reportó dividendos a Las Palmas. Un órdago tan aceptado como infructuoso. Ocurrió que el presidente y máximo accionista del club, Miguel Ángel Ramírez, declaró públicamente que había un acuerdo para el traspaso de Cardona, por lo que solo faltaba que este negociara su contrato con el Olympiakos. Al final, fue el jugador quien doblegó el brazo rival. “El único día que me sentí agobiado, pues todo el mundo te llama o escribe, fue cuando el presidente dijo eso”, reconoció hoy el propio Cardona. Sin embargo, él lo tuvo claro y así se lo hizo saber a su jefe directo: “Desde que se comentó todo esto hablé con el entrenador (Xavi García Pimienta) para transmitirle mis ganas de continuar este año en la Unión Deportiva. Por suerte así fue”.
Enérgico pateándose la banda izquierda sin descanso, tranquilo fuera del césped. Así comparece Cardona en sus exposiciones públicas, forma de comportarse que también reproduce en privado. “Esta situación la he llevado siempre con la máxima normalidad. De hecho, no leo prensa ni nada”, insistió Cardona, que habla de “realidad”: “Sé cuál es el día a día, cuál es la realidad, e intento centrarme en eso y en estar preparado para jugar aquí”. Desde el 1 de enero podrá negociar con otro equipo sin ningún tipo de limitación. “De momento no hay nada por parte del club”, desvelaba acerca de su posible renovación.
“Un punto de inflexión”.
Las Palmas recibe este domingo, a las 17.30 hora canaria, al Granada CF, un rival más que directo en la lucha por la salvación. Un punto les separa (2 y 3 cada uno, respectivamente). En cualquier caso, ni que fuera para sacudirse la lógica presión, Sergi Cardona despeja la pelota. “No creo que sea una final sino un punto de inflexión para el equipo en este inicio de temporada”, dijo el lateral izquierdo. “Este año será todavía más importante hacernos fuertes en casa y que se vayan pocos puntos del Estadio de Gran Canaria”, añadía.
Para hacerse con los tres de este domingo, estas son sus claves: “Tenemos que llevar el partido el ritmo que más nos interesa, ir a por él desde el primer minuto. Hay que dominar desde el principio. Ahí es donde somos más fuertes”.