NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

VILLARREAL

Ser o no ser con Setién: la gran decisión del Villarreal

La victoria contra el Espanyol da un respiro al entrenador, aunque el Villarreal sabe las dudas que genera el cántabro en el entorno y en el vestuario.

El gol en propia portería de Lecomte da un respiro a Quique Setién, aunque no por ello su continuidad en el Villarreal está garantizada. Ser o no ser con Setién, esa es la cuestión. El gran dilema del Villarreal, la gran decisión que tiene que tomar en los próximos días Fernando Roig Negueroles. El parón por el Mundial se puede ver como una oportunidad para que Setién trabaje con el equipo, pero también para que lo haga otro entrenador. De ahí que la cuestión que ahora da vueltas en la cabeza de los dirigentes amarillos es si el cántabro es el idóneo.

La duda que existe no deja de ser llamativa por sí misma, porque a fin de cuentas no hace ni un mes de la apuesta por Setién. Desde ese prisma, atendiendo a que no deja de ser un recién llegado, los cánones del fútbol y más tras la victoria contra el Espanyol (salvo hecatombe en la Copa del Rey) llevan a pensar en la continuidad de Setién. Él mismo ha indicado como uno de los hándicaps que ha tenido en su inicio en el banquillo amarillo los pocos días hábiles que ha tenido de entrenamientos ante el cúmulo de partidos. Pero la crisis que se ha generado entorno a la figura de Setién va más allá de los resultados.

El club es consciente que Setién genera dudas en el entorno y, lo que más les hace plantearse la idoneidad de su continuidad, también en el vestuario. La salida de Unai Emery ha pillado a contrapié a todos los protagonistas de esta historia, incluido el propio Setién, que hacía más vida de jubilado que de entrenador en paro preparándose para volver a los banquillos. Esa sensación de que estaba muy apartado de la alta competición le acompaña desde su presentación y la sintieron los futbolistas la primera vez que pisó el vestuario.

La vinculación de los jugadores con Emery era algo tangible. Muchos llegaron al Villarreal tras su llamada y juntos se proclamaron campeones de la Europa League y alcanzaron una semifinal de la Champions League. Esos éxitos fueron de todo menos casuales, ahí había un exhaustivo trabajo detrás y un amplio grupo humano de técnicos liderados por Emery. Esto último sienten los jugadores que se ha perdido y tampoco entienden ninguna necesidad de cambiar algo que funcionaba.

El discurso de Setién ha sido el propio de un entrenador que llega para sustituir a otro que ha sido despedido. Pero no es el caso del Villarreal. De ahí que los jugadores estén disconformes con que hubiera que alterar de un día para otro una forma de jugar que les había llevado al éxito. De eso se habló en el vestuario en la reunión del pasado martes, cuando Setién y los jugadores compartieron impresiones por espacio de dos horas y media. La reunión sucedió dos días después de que la pausada afición del Villarreal cantara “Quique vete ya”, lo que provocó ese cónclave en el vestuario y otros entre dirigentes y Setién y también jugadores.

Setién insiste en que él no ha engañado a nadie y que su concepto de fútbol es el que es, priorizando dejar su sello a los resultados. Y esa dicotomía entre el fin y los medios, entre priorizar por encima de todo un estilo o conseguir objetivos, es lo que tiene que asimilar la ejecutiva del Villarreal para mantener su apuesta en Setién, un fichaje que se cerró en tiempo récord por tener cuanto antes un reemplazo para Emery. De hecho, su llegada se anunció pocas horas después de hacerse oficial la salida del vasco hacia el Aston Villa. “A Rey muerto, rey puesto”. Pero a la corte, el vestuario, el cambio radical le ha generado un cortocircuito.

“Es momento de tener claro que lo que había ya no está, que las cosas han cambiado y que debemos estar muy unidos para volver a ser competitivos”

Rulli

“Es momento de tener claro que lo que había ya no está, que las cosas han cambiado y que debemos estar muy unidos para volver a ser competitivos”, dijo Rulli tras el partido del Espanyol. Ese mensaje, que lleva implícito cierta disconformidad con la transformación radical que plantea Setién -de hecho contra el Espanyol se vio a un Villarreal más cercano a lo que piensan los jugadores que a la filosofía del entrenador-, la han repetido otros jugadores como Raúl Albiol o Alberto Moreno.

“El equipo llevaba dos años construido de una manera y un cambio cuesta. No es sencillo. Le está pasando a muchos equipos que han cambiado de entrenador a estas alturas. Nuevas ideas, nuevo método y un equipo construido para el otro entrenador. Pero hay que ponerse a trabajar y coger cuanto antes los métodos del juego. Da igual la táctica, competir hay que competir”, dijo el capitán Albiol tras la derrota contra el Mallorca. Moreno fue directo: “Ha habido un cambio grande con la salida de Emery”.

En este contexto, con seis semanas por delante para trabajar, pero también con esa forma de ser de Setién, un entrenador que es concienzudo a la hora de imponer su idea, el Villarreal tiene que tomar la decisión, su gran decisión. Ser o no ser con Setién, esa es la cuestión.

Quique Setién, en Cornellá.
Ampliar
Quique Setién, en Cornellá. Enric FontcubertaEFE