Seis ‘secretos’ de Rüdiger
El nuevo central del Real Madrid esconde mucha historia: creció en un barrio de refugiados, tiene una ONG, su hermano es su representante, le apodan ‘Rambo’...
Antonio Rüdiger (Berlín, 29 años) podría escribir una extensa -e interesante- autobiografía. El primer capítulo podría relatar la crudeza de su niñez, el tercero sus primeros pasos en el mundo del fútbol, el cuarto la promesa que hizo a su madre y el último, tal vez cómo acabó cumpliendo uno de sus sueños: fundar una ONG para ayudar a los más necesitados de Sierra Leona. Rüdiger es más que un futbolista. Quienes le conocen señalan que se trata de una persona especialmente cercana y muy agradable. Aunque sobre el césped pueda convertirse, deportivamente hablando, en todo lo contrario. Estos son ‘seis’ secretos que tal vez no conocías sobre el nuevo central del Real Madrid.
Una dura niñez
Es hijo de padre afroalemán y madre de Sierra Leona. Ella tuvo que huir de la guerra que asoló Sierra Leona en la década de los 90. Creció en Berlin-Neukölln, un barrio de inmigrantes de la capital. Su familia carecía de recursos, pero hacía todos lo posible por él; de esta manera y tras mucho ahorrar, pudieron regalarle una camiseta de George Weah -su ídolo de la infancia- con la que iba a entrenar la mayoría de los días. Siempre señala un suceso que le marcó en especial: su madre, una vez, no pudo darle dinero para irse de excursión con sus compañeros de colegio. Pese a ello, siempre intentó ayudarle, bien acercándole a los entrenamientos o tratando de comprarle lo que necesitaba para estudiar o entrenar. “Mamá, algún día, todo este sacrificio valdrá la pena”, le dijo tras fichar por el Dortmund. Una promesa que ni él, ni ella, olvidan.
Apodo: ‘Rambo’
Su carácter cambia mucho cuando se le compara fuera de los terrenos de juego... y dentro. Porque lejos del césped es una persona amable y muy cercana, pero dentro se transforma en un futbolista que no especula. De hecho, nunca lo ha hecho. Ejemplo de ello es que de niño ya jugaba con notable dureza, yendo duro al choque y a los saltos. Es por ello que, en la academia de Berlín donde creció, le apodaron ‘Rambo’. Un mote que nunca ha rehuido y que, hoy en día, aún ostenta.
Hermano-representante
Si bien Messi tiene a su padre como agente e Icardi, a su mujer; Rüdiger ha decidido que sus negociaciones las debe llevar su propio hermano. Se trata de Sahr Senesie, que también fue futbolista, pero hoy en día se dedica exclusivamente a los despachos. Pasó por el Hoffenheim, pero la mayoría de su carrera transcurrió en el Borussia Dortmund, donde disputó más de 110 partidos entre el primer equipo y el filial. Jugó con las inferiores de Alemania, pero no llegó a debutar con la absoluta. Rüdiger es el hijo menor de un extenso árbol genealógico: tiene cinco hermanos, cuatro chicas y un chico (Sahr).
Sufrió racismo
El primer episodio fue siendo muy pequeño. Con ocho años intentó ayudar a una señora mayor a cargar unas bolsas de comida. Cuando fue a cogerlas, la señora le miró con cara de miedo -como él mismo relata-, pensó que iba a robarla y empezó a gritar pidiendo auxilio. En Italia también sufrió episodios racistas, en concreto, en un derbi contra la Lazio, donde se le profirieron insultos y gritos. Su compañero Daniele de Rossi se le acercó en el vestuario para brindarle su apoyo, algo que agradece enormemente en cada entrevista.
Pepe es su ídolo
Si bien en su niñez admiraba especialmente e George Weah, de mayor apuesta por... ¡Pepe! Lo confesó en una entrevista con PlayStation el pasado mes de mayo. “Si pudieses elegir a cualquier central en toda la historia del fútbol para jugar con él, a quién elegirías?”, preguntó el entrevistador. “Jugaría con Pepe”, respondió, desatando un espontáneo “¡Pepe!” en el periodista, que no esperaba ese nombre entre todo el abanico de leyendas que había abierto. Pero sí, es su ídolo actual: “Me gusta su forma de jugar. Siempre va al límite y a veces, algo sobre motivado, es verdad, pero así es como me gusta a mí ver el fútbol. Algunos sólo recuerdan de él una ‘agresividad’, pero tenía una calidad...”.
Líder de una ONG
Hace varios años cumplió uno de los sueños de su vida: abrir una ONG para ayudar a los más necesitados en Sierra Leona. El objetivo es dotarles de recursos económicos para educación, igualdad e infraestructuras. Durante la pandemia, por ejemplo, llegó a liderar una donación de 60.000 mascarillas, una campaña en la que colaboraron otros futbolistas como Giroud u Özil y que fue liderada por su Fundación, llamada por su nombre.