Savinho encuentra el hueco
Un gol y una asistencia del brasileño desatascan el duelo ante el Sheffield United. Antes había enviado un balón al palo
No hay que sacar conclusiones de un resultado en pretemporada, pero el Girona fue capaz de imponerse al Sheffield United, equipo de Premier, en el amistoso disputado en la ciudad deportiva del Manchester City. Un gol de Savinho, de bella factura, y una asistencia a Pablo Torre fueron suficientes para un Girona que ni perdió su identidad ni se alejó de su camino. Combinó siempre, poco profundo al inicio y mejor después, buscando superar a su rival con balón. Aún faltos de piezas y de ritmo, como su rival, Gazzaniga intervino mucho con los pies y poco con las manos.
El partido no arrancó especialmente bien para el Girona. Controlaron la posesión y combinaron bien, pero sin profundidad alguna. Combinaron demasiado con Gazzaniga ante la presión del Sheffield y no pudieron ganarles la espalda tampoco con desplazamientos en largo. Si dejó ya algunos destellos Justin, el único que se atrevió a encarar, pero sin generar a los ingleses un gran peligro. Tuvo el Girona mucho balón, pero en campo propio. Un remate al palo de Max Lowe, tras quedarse los gerundenses medio parados reclamando una falta, fue lo más destacado del inicio.
Y es que el Girona es un equipo mucho más peligroso cuando logra jugar en campo contrario. Algo que empezó a suceder a partir del 30′ cuando bajó la presión visitante y aumentaron los espacios. Blind dio un magnífico pase a Manu Vallejo a la espalda de la defensa que el andaluz convirtió en una asistencia aún mejor a Savinho. Solo ante el portero, disparó al palo. Una acción clarísima, de esas que un equipo de Primera no se puede permitir fallar. No en Liga. Esta acción espoleó a los de Míchel, que por fin fueron un equipo profundo. Pese a ello llegó el descanso sin que el marcador se hubiese movido.
La tónica siguió tras el parón, probablemente, porque Míchel exigió más a los suyos. No quedó contento del primer tiempo a juzgar por su expresión corporal, moviendo de lado a lado la cabeza y mirando demasiadas veces hacia abajo. La entrada de Pablo Torre contribuyó decididamente a ser más verticales, más peligrosos, pero Stuani no tuvo su tarde. Prácticamente no entró en juego. Y los suyos le echaron en falta. Aleix, en el 50′, obligó al portero del Sheffield a enviar su balón a córner.
El balón parado, todavía caótico, fue también protagonista. Así llegó la más clara del Sheffield tras el descanso, pero también un muy buen remate de Arnau que pudo perfectamente haber inaugurado el marcador. Pero el gol, si debía llevar la firma de alguien, era de Savinho. El más activo, desafortunado hasta el momento, vio un hueco en el palo largo y ahí envió sutilmente el balón.
El Sheffield dio un paso adelante y forzó un par de errores de Gazzaniga que pudieron costarle un disgusto. No fue así. Al fin y al cabo era un partido amistoso y acabaron con una gran mayoría de futbolistas del filial. Fue el Girona, tras una buena jugada de Savinho, quien encontró el gol. Pablo Torre definió perfectamente dentro del área.