Sandoval apuesta por el milagro
El nuevo técnico del Granada asegura que la permanencia es posible: “Si no creyera, me estaría engañando. Y no vengo a un sitio donde me quieren a intentar engañar a la gente”.
La situación del Granada es crítica. A pesar de que el director general, Alfredo García Amado, insiste en que el proyecto es solvente y crecerá a medio y largo plazo, el trabajo en los despachos desde verano hasta ahora ha sido una calamidad y el equipo rojiblanco está firmando hasta el momento la peor temporada de su historia en Primera. Para intentar ponerle remedio, la directiva nazarí apuesta por José Ramón Sandoval, que aterriza en Los Cármenes convencido de que aún hay posibilidades de salvar al Granada.
Necesita no sólo un trabajo impecable, sino más bien un milagro. A 13 puntos de la permanencia con sólo 30 por disputarse, el reto es gigantesco. El Granada necesitará sumar la mayoría de los puntos que le quedan en juego para tener opciones. “Si no creyera en la permanencia, no vendría aquí, me estaría engañando. Vengo con la energía y las ganas de dar la vuelta a la situación porque creo en ello”, aseveró durante su rueda de prensa de presentación.
Valoración de su regreso: “Para mí es una satisfacción volver aquí. Cuando me fui, lo hice sintiendo que era mi casa por el trato humano que tuve de todo el mundo. Quiero agradecer a Sophia Yang, Javier Aranguren, Alfredo y Matteo, que son las personas que toman decisiones junto con el consejo, la confianza que han depositado en mí. Pienso que vengo aquí porque en una parte de mi corazón está ese escudo del Granada. He vivido cosas maravillosas. Estos días atrás mis hijas me las han puesto en casa para que las volviera a sentir. Me gustaría volver a repetir esas cosas especiales que hemos vivido aquí. Ayer estuve con Matteo (Tognozzi) hablando muchas cosas de lo que es el fútbol, del equipo, de los jugadores, del vestuario… Lo primero que hablé con él fue que cogía esto porque me inspiraba una gran confianza el equipo de trabajo que había detrás y sobre todo la plantilla. Estudiando la plantilla uno por uno, es una satisfacción volver a Granada a dirigir a grandes jugadores”.
¿Cree en la permanencia?: “Le he dicho a los jugadores que si yo no creyera en la permanencia, no vendría aquí, me estaría engañando. Vengo a un sitio donde me quieren y volver a donde te quieren e intentar engañar a la gente, no lo haría. Vengo con la energía y las ganas de dar la vuelta a la situación, es porque creo en ello. El año pasado tuve una oferta de otro club en las mismas circunstancias y no lo cogí porque no creía en ello. No me sentía capaz de darle la vuelta a aquello. Cuando voy a los sitios me gusta analizar la situación, la ciudad, los partidos, la gente que dirige los clubes y la plantilla, sobre todo. Cuando me llamó Juan Carlos Cordero en aquella época, llevaba tiempo viendo al equipo y el potencial que tenía. Me conocéis, voy a tumba abierta. En esta plantilla hay jugadores que pueden ir a tumba abierta y lo vamos a intentar. Si algo tengo es que conozco esta ciudad. Cuando llegué aquí no le habíamos dado nada a cambio y nos lo dieron todo. Recuerdo el primer cortejo que nos hicieron antes de llegar al estadio, me quedé alucinado. Habíamos ganado cuatro partidos en toda la Liga y la gente se tiraba al autocar. Eso le hace falta a un equipo, que vea que detrás de ellos hay gente que lo siente, que lo vive y que quiere que lo consigan. No voy a dejar caer a este equipo de esa manera. Vamos a ver si lo podemos conseguir”.
Su visión del equipo: “Este equipo ha tenido partidos en los que el resultado no ha sido justo. El trabajo que han estado haciendo tanto Paco como Cacique ha sido un trabajo que ha penalizado mucho los resultados. La figura del entrenador es más por vocación que por otra cosa porque es una profesión de riesgo. Si no entra la pelota, independientemente del trabajo que hagas, estás fuera. Tenemos que limpiar un poco la cabeza, mentalizarnos de que somos capaces de hacerlo y ayudar a la gente que hay dentro del vestuario a que entiendan que son los protagonistas. Vengo a ayudar, a intentar que se equivoquen, como me pasó en aquella época. En aquel momento Lass Bangoura estaba cohibido, le dimos la confianza y lo intentaba. Necesito un equipo alegre, un equipo que intente salir a Cádiz a divertirse, a competir y hacer feliz a su gente. Que no lo vea como una final. El fútbol es sentimiento. Hay que intentar que los jugadores se sientan bien, cómodos, y poder sacar esto adelante. Tenemos que pelear por luchar hasta el último partido como la última vez. Lo pusimos todo para que el último partido se decidiera en nuestra casa”.
¿Más difícil esta vez o la otra?: “Aquí hay menos implicados en la pelea. Y los resultados de este fin de semana nos han perjudicado. Aunque nosotros ganemos los diez partidos, si los demás no pierden, es imposible conseguir nada. Si hemos ganado dos partidos en toda la temporada, no vamos a ser vendehumos y decir que vamos a ganar todos los partidos. Vamos a hacer nuestra propia Liga a tres o cuatro partidos en los que podemos sacarles 2, 3 o 4 puntos a los rivales. Tenemos que llegar al final. Nuestro primer objetivo es el Cádiz. Si empezamos por no competir bien o tener sensaciones buenas, va a ser muy difícil. No creo que los equipos que están por encima de nosotros estén muy sobrados. Mi primer objetivo es alcanzar al Cádiz. Tenemos que ir a ganar allí. Nos jugamos mucho. Esto es para valientes. Tenemos que salir a ganar, no podemos especular”.
“Mi primer objetivo es alcanzar al Cádiz. Tenemos que ir a ganar allí. Esto es para valiente. No podemos especular”
¿Es un marrón?: “Para mí no es un marrón. La llamada de un equipo de fútbol es un puesto de trabajo. Si encima me llama un club del que aún tengo mi cosita dentro, para mí es una gran satisfacción venir aquí al Granada. No vengo a tener protagonismo, simplemente a ayudar a mis jugadores. Están tristes porque son humanos y lo sienten y mucho. He visto un vestuario con mucha responsabilidad y un vestuario que me va a coger la mano. Han demostrado que son grandes profesionales que pueden conseguir grandes objetivos”.
Perspectiva de continuidad: “Voy a ser muy sincero, me han llamado y me han dicho esta es la situación. No puedo hipotecar a un club al que quiero. El trabajo se tiene que ver. Matteo tiene que estar satisfecho del trabajo que yo hago. Si está satisfecho de mi trabajo durante estas diez jornadas, todo va a fluir. Si no, pues esto es el mundo del fútbol. Acepto los retos por estas cosas. La vez que vine aquí no tenía nada firmado, luego tardamos mes y medio en firmar. Estoy agradecido a las personas que me dan la oportunidad. No quiero hipotecar a este club para nada, todo lo contrario, vengo a ayudar”.
Su equipo de trabajo: “Conmigo viene Ismael Martínez, mi segundo, no nos hemos separado desde hace 25 años. El club está fortalecido de grandes profesionales y me voy a hacer cargo de que estos profesionales me ayuden mucho. Jorge Molina va a estar full time con Ismael y conmigo. Por lo que representa y por lo que me va a ayudar. Lucena, igual. Se queda el preparador físico, conozco a los servicios médicos y poco a poco iré conociendo a más gente. Los de negro somos los que estamos aquí para ayudar. Creo que van a ser igual de profesionales que han sido con mis dos compañeros”.
Objetivo estos primeros días: “Quiero tener esta semana de contacto, vamos a aprovechar esta semana para ser nosotros mismos y ver lo que tenemos que mejorar. Tenemos que potenciar las cosas buenas, que hay muchas. La semana que viene, cuando ya se vayan incorporando los internacionales, haremos más hincapié en cómo afrontar el partido contra el Cádiz”.
“La afición va a estar con nosotros. Es normal que estén descontentos, han ganado sólo dos partidos. Esto lo sacamos entre todos”
Posible desapego de la afición: “Cuando viene en mi etapa anterior no les dábamos nada y nos daban todo. Van a estar con nosotros. Es normal que estén descontentos, han ganado sólo dos partidos. Esto lo sacamos entre todos, no lo van a sacar los jugadores solos ni Matteo, Alfredo, Sophia o Sandoval. Cuando hay una masa social detrás que tiene unidad, se puede con todo. Vamos a transmitir que la afición se sienta orgullosa de cómo compite su equipo. Luego estamos en Primera División y ya sabéis lo que cuesta ganar”.
Trabajo psicológico: “En este mundo, todos los aspectos son fundamentales. El psicológico, el táctico, el físico… Si suspendes en una, no apruebas el curso. Vamos a intentar tener un 7 en todo. No puedo cambiar al equipo fisiológicamente ahora mismo. Hay que soltar lastre. Las pretemporadas son lo mejor que vive un entrenador porque los jugadores se sienten importantes, creen que van a jugar. Quiero que ahora parezca una pretemporada y todos se sientan importantes. Tenemos que competir como cuando te preparas para un combate de boxeo. El sparring tiene que ser el mejor. Yo tengo que ser el mejor sparring ahora mismo. Y todos los jugadores tienen que entrenar como si fuera su último día de entrenamiento. Eso hará que psicológicamente estén bien preparados, que estén todos metidos. Cuando hay un cambio de entrenador, el jugador lo percibe. Si eso nos ayuda para pegar el primer impulso, bienvenido sea”.
¿Le pone más el reto de hace nueve años o este?: “Me pone más este reto porque tengo diez partidos, en el otro sólo tenía cuatro. Estamos en una rueda de prensa de presentación de un entrenador porque un consejo de administración han hecho un cambio para buscar una solución y estamos buscándola. Se buscó la solución en invierno y ahora se está buscando otra porque no funciona. Todos queremos que funcione. No sabemos si Sandoval va a ser la solución. Estamos poniendo de nuestra parte. Tenemos que empujar todos. El orgullo de esta ciudad nadie lo va a pisotear y por eso estamos aquí”.
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