Sampaoli, casi visto para sentencia
La afición estalla tras el ridículo en el Metropolitano y el vestuario expone que nadie entiende al técnico, pero en el club no se tiene clara su destitución
La continuidad de Sampaoli en el Sevilla pende del fino, pero resistente hilo, de lo costosa que sería su destitución. La humillación sufrida ante el Atlético en el Metropolitano ha agrandado la herida que la pasada jornada abrió Osasuna, provocando que la mayor parte de la afición sentenciara al técnico de Casilda por sus erróneos planteamientos y aún peores lecturas de los partidos.
Para colmo, el vestuario también expresó que no está ni mucho menos al cien por cien con su entrenador. Y lo curioso es que quien lo aireó fue Marcos Acuña, un compatriota de Sampaoli. “Los jugadores tenemos que entender qué necesitamos. Nos dan herramientas y no las entendemos”, afirmaba el lateral zurdo, que hace una semana ya fue protagonista al arrancar de las manos de sus compañeros y tirar al suelo el papel con las instrucciones que Sampaoli había dado.
Con la afición y el vestuario en contra, la continuidad de Sampaoli sería una quimera si no fuera por el costoso desembolso que supondría su destitución. El club da síntomas de verse más que superado en todos los aspectos y nadie parece preparado para tomar una decisión del calibre de la segunda destitución de un entrenador esta temporada. Y mucho menos, encontrar a un sustituto que garantice salvar la categoría a final de temporada.