Sabaly, otra solución del milagrero Pellegrini
El senegalés hace un partidazo en el lateral izquierdo y permite al Betis olvidarse de las bajas en ese flanco. El técnico confió en un jugador que llevaba seis meses en el dique seco por las lesiones.
Un jugador de cristal que exhibe su catálogo de virtudes cada vez que está sano. Youssouf Sabaly se convirtió en uno de los nombres propios después del partidazo que se marcó en la victoria contra el Athletic. Manuel Pellegrini volvió a recurrir a su condición de milagrero (tercera acepción del DRAE: “Que hace milagros”) para inventarse una solución de urgencia ante las desgracias que azotaban al costado zurdo verdiblanco. Sin los lesionados Abner Vinicius y Miranda, éste también sancionado, echó mano el técnico chileno del senegalés, que se desempeñó con alta nota en la banda contraria a su demarcación habitual. Bien es cierto que el defensa nacido en Chesnay (Francia) ya había probado esta ubicación de forma temporal en otras ocasiones, pero contra los vizcaínos se destapó con un actuación de mucho mérito, reflejando un nivel más alto que los dos laterales izquierdos naturales.
Llegaba mohíno, alicaído, triste, decepcionado este Betis al Villamarín, donde la afición aplaudió y coreó antes del partido a Pellegrini para premiar su buen hacer en el club desde su llegada pese las eliminaciones europeas, y terminó el encuentro con una sonrisa de oreja a oreja gracias al triunfo ante el equipo de moda de LaLiga en los últimos meses. Sabaly fue parte relevante de ese engranaje para maniatar a los vascos. Dio profundidad a los verdiblancos con peligrosas incursiones que acabaron en buenos centros con su pierna mala y en defensa apenas sufrió con Berenguer, primero, y con Iñaki Williams, después, quien por cierto salió despedido tras un choque de alto voltaje con el bético.
Tiene mérito su rendimiento después de seis meses en el dique seco. Sabaly no jugaba con el Betis desde hace seis meses, cuando empezó LaLiga de titular frente al Villarreal, el Atlético y el Athletic. Precisamente en Bilbao fue su última comparecencia (27 de agosto), reposó en la cuarta jornada y cayó lesionado con Senegal, un tormento que ha continuado hasta ahora tras recaer meses después y volver a ser reclamado por su selección para la Copa de África, donde no llegó a disputar ningún minuto. Incorporado ya a la disciplina verdiblanca, puede considerarse un ‘fichaje’ para Pellegrini en este último tercio liguero y no sería una locura que el Ingeniero le diera la titularidad el domingo en el Metropolitano contra el Atlético… de lateral izquierdo nuevamente.
Las lesiones y la selección han privado a Sabaly de partidos en su tercera temporada en Heliópolis, donde muchos aficionados han echado de menos sus arrancadas y otros tantos piensan que sería el dueño de la banda derecha por delante de Bellerín y Ruibal. Los problemas musculares le dieron la lata en su primer año en el Betis y, en cambio, en el segundo disfrutó de continuidad. Tras un aciago curso 23-24, Pellegrini sabe que con el senegalés de vuelta, el lateral izquierdo también está bien cubierto, aunque sea una solución de urgencia del mago chileno.