Sabaly, arma silenciosa

Se llama Youssouf Sabaly y se ha convertido en uno de los hombres de moda en Heliópolis. El lateral derecho atraviesa un momento dulce desde que regresó de su lesión y ha sido decisivo para que el Betis encarrile dos victorias seguidas y deje casi listo su tercer billete consecutivo a Europa. Dos partidos casi perfectos del senegalés. Uno ante el Athletic y otro contra el Rayo. Su peso es tan diferencial en esa banda derecha que ha sumido a un segundo plano la figura de Aitor Ruibal, su reemplazo habitual en ese carril diestro desde el inicio de campaña.

Su brillo no es una casualidad. Pellegrini confía en sus virtudes defensivas y ofensivas y ahora vislumbra el que quizás es su mejor nivel desde que llegara al equipo verdiblanco la pasada campaña. Ante el Athletic, minimizó a Nico Williams hasta que Valverde tuvo que reemplazarlo. Ante el Rayo, anotó un gol de gran belleza desde fuera del área para abrir la lata de un choque que parecía tener el viento favorable al adversario hasta ese instante. Dos partidos que confirman a Sabaly como el arma silenciosa del plan de Manuel Pellegrini.

El lateral mira al derbi con la ilusión de seguir siendo diferencial sobre el césped. Tendrá ahí retos mayores. Quizás a Bryan Gil y a Acuña. Pero acepta los desafíos venideros tratando de explotar su mejor fútbol. El Mundial sentó especialmente bien al futbolista verdiblanco, que tiene un sitio firme en el proyecto de la próxima campaña pese a las dudas surgidas con su papel en su primer año en el club. Ahora, es una pieza intocable para Pellegrini.