Rosier calienta la banda
El francés de Leganés ha pasado de jugarlo (casi) todo hasta la décima jornada a disputar sólo 28 minutos en las últimas cuatro fechas. El tema incomoda a Borja Jiménez.
Valentin Rosier ha pasado de ser uno de los defensas con mejor valoración estadística de toda la Primera División (todavía hay varios apartados destacados en los que figura) y un intocable en los planes de Borja Jiménez a convertirse un futbolista que apenas calienta la banda (de suplentes, se entiende) del Leganés. Cuatro jornadas consecutivas engarza el francés en el banquillo y apenas un puñado de minutos desde entonces: los 13 que jugó ante el Girona y los 15 que disputó ante el Real Madrid. Entre medias, fue titular en Copa ante el Ciudad de Lucena, pero ni siquiera terminó el choque. Acabó sustituido en el 63′.
El balance es llamativo: de acumular 843 minutos en las diez primeras jornadas (todas al completo menos en la cuarta fecha, cuando salió al césped en el 57′) a desaparecer y completar sólo 28 minutos de los 360 posibles en las últimas cuatro jornadas. Una regresión que se ha convertido en tema de debate en Butarque y que ha sido capaz de generar tensiones no muy habituales en sala de prensa.
“Altimira está mejor”
Ocurrió que, tras el triunfo del Real Madrid en Butarque (0-3), uno de los periodistas que sigue la información habitual de los pepineros trasladó a Borja Jiménez la duda de por qué jugaba Altimira en lugar del propio Rosier. Apenas una hora antes el lateral derecho cedido por el Villarreal había cometido el error del 0-1 en una conducción que pasó de un posible ataque del Leganés, al tanto que encarriló la goleada blanca.
“Es una pregunta que tenía pensada de antes del partido, lo digo por no sonar oportunista”, empezó a enunciar el periodista que, apenas mentó el nombre de Altimira y Rosier, fue interrumpido por Borja Jiménez. “Entonces sí es oportunista”, valoró la pregunta del redactor. “La tenía pensada antes del partido”, se justificó de nuevo el periodista. “Eso no lo sé, eso no lo sé”, dejó en el aire Borja Jiménez con el ambiente ya cargado de tensión. “¿Por qué juega Altimira y no Rosier?”, acabó rematando la duda el redactor. El entrenador respondió rotundo, directo y aparentemente no muy contento por la pregunta. “Pues que está mejor Altimira”, se limitó a justificar.
Temor al mercado invernal
No es habitual que las respuestas del preparador sean así. Cortas. Cortantes. Y cuando eso sucede (ocurrió antes con Haller) puede esconder detrás un ánimo que incomoda a un preparador que (por ahora) parece haber convertido la presencia de Altimira en una de sus apuestas más personales esta temporada, ya no solo como lateral derecho, sino incluso en otras posiciones. En esta temporada ya se le ha visto competir como extremo izquierdo hasta en dos ocasiones.
Entre tanto y con la cercanía del mercado invernal, en Turquía (de dónde procede Rosier, que liberó su contrato con el Besiktas para acabar en Leganés) ya se empieza a filtrar el interés del Galatasaray por su incorporación. Txema Indias, director deportivo, ha desmentido públicamente que haya habido interés alguno por él, pero en las oficinas de Butarque (como sucede con otros jugadores con pocos minutos) temen que se esté empezando a preparar el terreno para una potencial petición de salida en caso de que el ostracismo de Rosier se prolongue en el tiempo.
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