Relatos del Camp Nou (XX): Gazpacho, Ronaldinho y esperanza
El Sevilla se negó a adelantar el partido al martes como solicitaba el Barça y ante esta situación el club catalán dijo que se jugaría el miércoles, pero a las 00,05. Fue inolvidable.
Las quejas sobre los horarios de los partidos quedan desfasadas cuando se recuerda el partido de hace casi 20 años en el Camp Nou entre el Barcelona y el Sevilla. Eran las 00.05 de la noche del miércoles 3 de septiembre del 2003 cuando el árbitro decretó el inicio del que suponía el primer encuentro oficial de Liga del conjunto de Rijkaard frente a su afición. Por tanto, era también la presentación oficial de Ronaldinho, la estrella de un nuevo proyecto que lideraba una directiva joven y ambiciosa elegida meses antes y que lideraba Joan Laporta.
Que esa junta había llegado para romper moldes, quedó claro desde el principio. No se amedrentaban ante nada ni ante nadie y cuando se encontraron ante la dificultad para fijar el horario del partido ante el Sevilla aplicaron una solución que pasó a la historia como ‘El Partido del Gazpacho’.
El Sevilla se negó a adelantar el partido al martes como solicitaba el Barça y ante esta situación el club catalán dijo que se jugaría el miércoles, pero a las 00,05. Para animar a la gente que acudiera al estadio a una hora tan intempestiva y aprovechando que el visitante era el Sevilla, se regaló un brick de gazpacho a todos los asistentes. El estadio se llenó, el Barça empató gracias a un golazo de Ronaldinho. Retornaba la esperanza.