Relatos del camp Nou (XIII): La presión en forma de caramelo
Johan Cruyff dejó de fumar en 1991 después de ser operado con un doble by-pass. Cambió los Camel por los Chupa-Chups. Y los convirtió en su arma para ganar una Liga increible.
Johan Cruyff cambió la historia del Barcelona como jugador y, especialmente, como entrenador. Llegó a un equipo acomplejado y le hizo ganar su primera Copa de Europa, cambió el estilo de juego y consiguió cuatro Ligas seguidas, tres de ellas, logradas en el último minuto de la última jornada.
Dos de ellas son las famosas Ligas de Tenerife ganadas al Real Madrid, que viajó a la isla mientras el Barcelona derrotaba en su estadio a la Real Sociedad y al Athletic Club. pero el suspense máximo se vivió en la temporada 93-94 en pugna con el Deportivo de Arsenio Iglesias. La Liga del Chupa-Chups.
Johan Cruyff había sido toda su vida un fumador compulsivo. Incluso hay fotos suyas fumando en los vestuarios en el descanso de los partidos cuando era jugador. En febrero de 1991 tuvo que ser operado con un doble bypass coronario y a consecuencia del susto mayúsculo cambió los Camel por los Chupa-Chups.
El caramelo con palo se convirtió en una arma de presión ante el Depor de Arsenio, que sufrió toda la presión que era capaz de ejercer el holandés. Para contrarrestarla incluso los Riazor Blues repartieron en Riazor 32.000 de estas golosinas para tratar de conjurar un desenlace que acabó siendo fatal para su equipo.