Raphinha empieza a verle las orejas al lobo
El brasileño vio puerta ante el Almería después de catorce partidos sin marcar y espera seguir así para convencer a Xavi que puede ser decisivo con goles.
Es un lamento constante de Xavi. La poca efectividad del Barça de cara a portería les está pasando factura y, en parte, explica que el equipo esté demasiado alejado del Girona y el Real Madrid en la cabeza de la Liga. La llegada de Vitor Roque en este mercado de invierno, en principio, debe servir para paliar el déficit goleador de los delanteros azulgrana y por consiguiente, obligar a que todos ellos se pongan las pilas e intenten mejorar sus registros.
Lewandowski es el máximo realizador del Barça en LaLiga con ocho goles y luego ya vienen Ferran Torres, João Félix y Raphinha, con tres. Precisamente los mismos que lleva Sergi Roberto, centrocampista y con muchos menos minutos disputados que los tres jugadores antes citados.
De todos ellos, Lewandowski es el que tiene la titularidad más que asegurada hasta el momento. Raphinha y João Félix están contando con la confianza de Xavi pero su presencia en el once no está tan asegurada como la del polaco porque tanto Ferran Torres como Lamine Yamal aprietan. Y ahora se sumará Vitor Roque.
Xavi reclama a gritos más efectividad y Raphinha es uno de los que parece que empieza a verle las orejas al lobo. Quiere y está convencido que puede aportar más goles y ser más decisivo para el equipo. Su bagaje de tres goles es muy pobre. El otro día contra el Almería puso fin a una racha de catorce partidos sin marcar (entre Liga y Champions). Su último gol había sido en el partido ante el Mallorca en el ya lejano 26 de septiembre, un período de tiempo demasiado largo para un delantero titular en el FC Barcelona.
Xavi está bastante satisfecho con el rendimiento general del brasileño. “Con él en el campo siempre pasan cosas”, dijo la temporada pasada. En el apartado de asistencias no hay queja alguna. Lleva cinco pases de gol en LaLiga y en este aspecto está ayudando mucho al equipo en los últimos partidos porque lleva cuatro de consecutivas (Atlético, Girona, Valencia y Almería), pero a un atacante del Barça se le debe exigir más. Mucho más.
En la Champions, por ejemplo, todavía no se ha podido estrenar, aunque si que es cierto que se perdió los partidos ante el Oporto y el Shakhtar por lesión y en la última jornada en Amberes fue suplente. Pero lo de Raphinha con la máxima competición europea ya empieza a preocupar porque la temporada pasada también fue incapaz de ver portería en los cinco partidos que disputó (ante el Bayern de Múnich y el Inter de Milán en casa y fuera y ante el Viktoria Plzen).