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UD ALMERÍA

Proyecto de futuro para el Almería

Todos los fichajes que ha realizado han firmado como mínimo por cinco años. Sólo Mariño cumple contrato el próximo mes de junio.

01/09/23 PARTIDO PRIMERA DIVISION 
ALMERIA - CELTA DE VIGO 
segundo gol del almeria
Carlos BarbaDIARIO AS

La diferencia de la era Turki Al-Sheikh con la última de Alfonso García es más que palpable, no sólo en cuanto a traspasos copiosos se refiere, sino en lo relación a los contratos. Si el empresario murciano solía realizar relaciones contractuales de apenas uno o dos años (firmando a los futbolistas a corte cero), el jeque se está caracterizando por vínculos largos después de abonar altos traspasos (4′5 millones ha sido lo más barato que ha pagado en el presente estío por un fichaje).

La entidad rojiblanca ha realizado ocho incorporaciones en la última ventana invernal, aterrizando Maximiano y Baba en calidad de cedidos por la Lazio y el Real Mallorca, respectivamente, si bien el primer préstamo se debe a cuestiones del límite salarial y el segundo por un problema entre los bermellones y el Leganés. Ambos (el mediocentro incluso acaba contrato con el Mallorca el próximo mes de junio) pasarán a ser propiedad del Almería a final de temporada en caso de permanencia.

Los seis fichajes han firmado como mínimo hasta 2028. Édgar, Montes y Koné se han comprometido por cinco años, mientras que los vínculos Pubill, Lopy y Arribas expiran en 2029, al igual que el de Luis Suárez tras ejecutar el Almería la compra obligatoria tras la permanencia. No son los únicos futbolistas cuyo contratos acaban en un lustro, al tener también hasta 2028 Kaiky y Lázaro Vinicius, Robertone.

En 2027, por su parte, acaba el contratos de Pozo, mientras que en 2026 están los de Mendes, Akieme, Centelles, Baptistao, Puigmal, Melero y Embarba. Dos años más le quedan a Fernando, Chumi y Ramazani, siendo Mariño el único que acaba su relación contractual a final de la presente temporada. El objetivo de esta política es garantizar el futuro y, sobre todo, tener margen para negociar para sacar rédito económico en hipotéticos traspasos, con el inconveniente de tener que tragarse a futbolistas si salen rana.