Presión a tres bandas
El Barça aspira a dormir líder esta noche si gana hoy al Elche. El deseo culé: superar al Real Madrid y dejar al Atlético a seis puntos antes del derbi.
El fútbol es tan generoso y retorcido como el crupier de un casino, que cuando ve a dos clientes deprimidos porque llevan una mala noche, enseguida se presta diligente a montar una mesa de juego para ellos dos con la certeza de que arruinará a uno y el otro, en cambio, podrá irse a casa sonriente. Ambos volverán al día siguiente (sigue el partido en directo en AS.com). Más o menos este es el paisaje que se dibuja en el Spotify Camp Nou esta tarde (16:15 h. DAZN) donde un Barça dolido por su derrota ante el Bayern el martes y un Elche en estado más que precario se encuentran para ver quién se va al parón contento.
El Barça aspira a un premio gordo. Uno de esos que sirven para restañar heridas europeas porque además imponen presión a los dos equipos que, en principio son sus máximos rivales: Atlético de Madrid y Real Madrid que juegan mañana su derbi.
En caso de ganar al Elche, el Barça llegaría al primer parón de la competición como líder virtual a la espera de lo que pasara en el Metropolitano. Un punto por encima del equipo blanco, que tendría en su mano recuperar la primera posición y seis por delante del Atlético. Presión a dos bandas a la que se suma la que se impone el propio Barcelona, que ya gripó ante el Rayo Vallecano en la primera jornada. Los escenarios felices prefabricados acostumbran a resultar indigestos para los de Xavi.
Por su parte, el Elche llega al Camp Nou muy apurado. Solo ha sumado un punto de 15 y ha recibido trece goles, con sólo dos a favor. A domicilio, apenas ha tirado a puerta y es el penúltimo de la tabla. En su último encuentro, lo peor no fue la derrota, fue la manera de dilapidar el partido en su propio estadio encajando un 0-4 por parte del Athletic Club en la primera media parte.
Cambios. Ante esta apuesta decisiva, ambos entrenadores se ven obligados a cambiar cartas. Xavi tiene muchas más, por lo que presentará jugadores que no lleguen castigados de Múnich, mientras que Francisco, en vez de ir al mazo de cartas, se verá obligado a cambiar el estilo de juego.
Así que mientras el de Terrassa puede echar mano de Eric o Ansu, el almeriense ya ha dejado claro que va a reforzar su defensa. Hagan juego.
