Pacheta iguala un hito de Mendilibar
El técnico del Real Valladolid festejó ante el Elche su tercera victoria consecutiva en Zorrilla, algo que no sucedía en Primera desde la temporada 2008-09.
El Real Valladolid se ha propulsado en las últimas dos semanas hacia la mitad de la tabla clasificatoria gracias a las tres victorias consecutivas logradas en Zorrilla, las logradas ante Celta, Real Sociedad y Elche. El conjunto blanquivioleta alcanzó frente a los franjiverdes los 17 puntos, que le colocan en la décima plaza de la clasificación después de que Pacheta haya igualado un hito de Mendilibar, que fue el último técnico que consiguió ese nueve de nueve como local.
De hecho, el técnico de Zaldibar alcanzó las cuatro seguidas en las primeras fechas de la temporada 2008-09, en las que Sevilla (3-2), Real Madrid (1-0), Mallorca (3-0) y Deportivo de La Coruña (3-0) fueron la ‘víctimas’ de los vallisoletanos. Por tanto, al de Salas de los Infantes le quedaría por delante el reto de igualar a su homólogo en la primera jornada post-parón, ante el Real Madrid. Por el camino, ha igualado ya a otros dos entrenadores de este siglo XX.
Es el caso de Fernando Vázquez, que hizo lo propio en el otoño de 2003, que, en un inicio de curso tirando a irregular, vio ganar a su Pucela al Athletic Club (2-0), al Albacete (2-0) y al Atlético de Madrid (3-1), y de Pancho Ferraro en la 2000-01, en la que se impuso al Mallorca (2-0), a Las Palmas (1-0) y al Real Zaragoza (2-0). Se da la circunstancia de que ninguno de los dos acabó la temporada: el gallego fue destituido antes del descenso y el argentino dimitió antes de que Pepe Moré lograra la salvación.
Mientras tanto, en las últimas seis temporadas en Primera División, tanto Djukic como Sergio González enlazaron dos triunfos de locales (el catalán, en dos ocasiones), aunque no pudieron afirmar aquello de que “no hay dos sin tres”. Tanto Sergio hace dos campañas como Onésimo, Clemente y Juan Ignacio Martínez en los anteriores años en los que el Real Valladolid dio con sus huesos en Segunda fueron incapaces de pasar de triunfos aislados.