Pablo Ramón apunta al Mirandés
Según ha podido saber AS, el defensa del Castilla está cerca de sellar su renovación con el club blanco. El equipo burgalés es el mejor posicionado para un préstamo.
Uno de los frentes abiertos del Castilla está en disposición de cerrarse. Pablo Ramón (22 años) terminó su contrato con el equipo blanco el pasado 30 de junio y, según ha podido saber AS, su renovación está próxima a cerrarse. El entendimiento entre las partes ha sido bueno. Una de las claves en el avance de la negociación es la segunda fase de la operación. Y es que, la idea es que el polivalente defensa mallorquín se marche cedido a un club de superior categoría una vez plasme su firma en el nuevo contrato. En estos momentos, es el Mirandés de la Liga Hypermotion quien tendría más papeletas. De cortarse los flecos y concretarse sería un paso adelante de Pablo Ramón, que se quedó con el ascenso a Segunda en los labios, pero le podría pegar la dentellada a la división de plata con el equipo entrenado por Alessio Lisci.
El defensor ha tenido varios equipos interesados en su situación, pues se trata de un jugador que podía haber elegido el destino que hubiera deseado y cuenta con una combinación de potencial, personalidad y físico que le convertían en un caramelo en el presente mercado estival. No obstante, el proyecto que más le seduce en estos momentos es el del Mirandés. La presencia de Alfredo Merino en la dirección deportiva puede haber ayudado, pues Merino fue uno de los factores claves para que Pablo cambiase el Mallorca, con el que había debutado ya en Copa del Rey convirtiéndose en el primer futbolista del Siglo XXI en estrenarse con el primer equipo bermellón, por La Fábrica.
Polivalente
La intención del Real Madrid es no perder el control sobre un futbolista al que unos problemas físicos le hicieron perder un poco de vuelo, pero que ha terminado la temporada como titular para Raúl en el Castilla. Tanto en la eliminatoria contra el Barça Atlètic como en la final ante el Eldense, Pablo Ramón apareció en el dibujo inicial como lateral derecho o carrilero, en la defensa de cinco planteada por el Siete. Aunque la posición fetiche, y la que le hizo firmar por un Madrid que se impuso en 2019, entre otros, al Barcelona para ‘sacarle’ de las islas, es la de central, su polivalencia le permite ocupar indistintamente ambos costados de la retaguardia.
Pablo Ramón ha disputado una campaña atípica, con una importancia intermitente, hasta que se impuso a Vinicius Tobias en la batalla por el carril del dos en el tramo decisivo del curso. Cuando Raúl se jugaba el anhelado ascenso, eligió al 5 y la apuesta le salió cara. Especialmente en la vuelta contra el filial del Barça, donde su presencia fue clave para orquestar la remontada. En el Di Stéfano mostró gran parte de sus aptitudes, desesperando a Estanis, uno de los futbolistas más desequilibrantes de la categoría y a quien Xavi le hizo debuta en primera en la 2021-22. A sus 22 años, Pablo Ramón se siente preparado para dar un paso adelante en su carrera y el Mirandés, préstamo mediante, es quien más papeletas tiene para acogerle.