Otro discordante al rescate

Dada la situación, es prácticamente seguro que el Real Madrid acudirá al mercado de enero para hacerse con un central con el que terminaría la temporada. Dependerá del perfil del mismo su posición en la mente de Ancelotti, pero por lo pronto el técnico ya sabe que para el primer duelo de 2024, el 3 de enero en casa ante el Mallorca, sólo tiene a un central disponible: Militao y Alaba están lesionados y Nacho, sancionado tras la roja directa que vio en Vitoria. Sólo queda Rüdiger y su acompañante ese día, sí o sí, será Tchouameni. Es el central de emergencia del Real Madrid para este curso.

Y eso que ese cambio de posición no termina de convencer al jugador, como el propio Ancelotti reveló antes de la visita al Alavés: “No le gusta jugar de central, como a Camavinga no le gusta jugar de lateral. En la emergencia, lo hizo muy bien. Sabe que si hay emergencia, jugará ahí”. En Vitoria hubo una emergencia y cumplió, aunque poco exigido: en 35 minutos no tuvo que hacer ni una recuperación, ni una entrada, ni un duelo áereo... Fue un test más realista cuando jugó todo el duelo ante Osasuna ahí en casa, a principios de octubre: ganó seis duelos de nueve, cuatro de cinco disputas por arriba, hizo cuatro recuperaciones...

Con todo, salió Carletto encantado de su papel en Mendizorroza: “Se enfadará, pero es un central espectacular. Juega muy bien, saca el balón como pocos y tácticamente es muy bueno”. Es cierto que, jugando de central, su clarividencia con balón queda mucho más a la vista: ante Osasuna dio 90 pases, 83 de ellos buenos; y frente al Alavés fueron 30 desplazamientos de balón, los 30 sin fallo. Un 100% de acierto que enamora a su entrenador.

Y el propio Tchouameni ya se lo toma con humor. Tras aquel partido ante Osasuna tuiteó, citando a su compañero Rüdiger: “No te acostumbres hermano, es sólo por un día”. Ayer reposteó ese mensaje añadiendo sólo unos puntos suspensivos...

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