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VALENCIA

Nuevo Mestalla, pico y pala

El Ayuntamiento aprueba las fichas urbanísticas que regulan los compromisos y exigencias del Valencia CF para reanudar y acabar la obra del Nuevo Mestalla.

Esqueleto del Nuevo Mestalla.
Kai FörsterlingEFE

El Pleno del Ayuntamiento de Valencia ha aprobado el Plan Urbanístico Valencia CF, que regula los compromisos, exigencias y también ventajas urbanísticas que tendrá el Valencia CF para reanudar y acabar la obra del Nuevo Mestalla. La aprobación de las fichas ha llegado sobre la bocina, a 10 días de que Peter Lim tuviera “barra libre” para hacer y deshacer con los terrenos del Viejo y Nuevo Mestalla sin obligación alguna de reanudar y acabar el estadio. Quizás si se hubiera aprobado antes, Valencia estaría ya entre las sedes del Mundial y la Generalitat Valenciana no tendría que estar enviando escritos a la FIFA para que incluya a la tercera capital de España. Pero, lo aprobado hoy por el Ayuntamiento, con un acuerdo llamativo entre PP, Compromís y PSPV-PSOE, con el voto en contra de los cuatro concejales de de VOX, socios de gobierno de la alcaldesa María José Catalá, abre un escenario de pico y pala. Ahora el Valencia CF ya no tiene excusas para reanudar la obra. Tiene licencias y garantías jurídicas.

El Valencia CF, promotor de la obra del Nuevo Mestalla, tiene 36 meses desde que reciba la notificación de las licencias para construir el estadio. Seis meses para reanudar la obra, 30 para acabarla. El club, con la aprobación de las fichas, recibe derechos y también obligaciones. El Valencia CF ya sabe de cuántos metros cuadrados dispone para edificar y para uso terciario en el Viejo y Nuevo Mestalla, es decir, Peter Lim recupera parte de las ventajas urbanísticas que había perdido por sus incumplimientos en la reanudación de la obra durante sus 10 años como máximo accionista del club. Pero, a su vez, el Ayuntamiento pone en blanco sobre negro también una serie de exigencias y garantías en forma de plazos, garantías, auditoria externa y sanciones si el Valencia de Peter Lim no cumple con su parte, que no es otra que la construcción en tiempo y forma de un estadio que lleva paralizado desde 2009. Así, con la aprobación de las fichas urbanísticas por 28 de los 33 concejales, Valencia, al menos, pasa de pantalla en un juego en el que estaba bloqueado desde hace años.

Momento de la votación de la moción de las fichas urbanísticas en el Pleno del Ayuntamiento de Valencia.
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Momento de la votación de la moción de las fichas urbanísticas en el Pleno del Ayuntamiento de Valencia.

“Lo que aprobamos no es el mejor escenario, pero evita el peor de los escenarios”. La frase es de Borja Sanjuán, portavoz del PSPV-PSOE. Idéntica reflexión a la de Papi Robles, de Compromís. Los partidos de la oposición tienen las tres partes que venían pidiendo: licencias, auditoria y convenio. El PP ha aprobado unas fichas urbanísticas similares a las que desde hace más de un año circulaba por los despachos del anterior equipo de gobierno, aunque con matices para regular la actuación del club en este asunto. Este consenso de hoy, como se ha dicho, llega sobre la bocina y evita que Peter Lim pudiera hacer y deshacer a su antojo a partir del 3 de agosto sin obligación alguna. Lim hubiera perdido metros de edificabilidad porque llegados a esa fecha, el plan urbanístico que habría entrado en vigor sería uno anterior. Pero en ese escenario Lim no hubiese tenido obligación alguna, es decir, ahora para poder vender las parcelas y beneficiarse de las ventajas urbanísticas tiene que cumplir previamente con la construcción de un Polideportivo en Benicalap y con fases de construcción del estadio. De haberse llegado a esa fecha del 3 de agosto sin las fichas aprobadas, Lim habría tenido menos metros, sí, pero los podría haber vendido al día siguiente sin poner piedra alguna en la obra del Nuevo Mestalla.

El Valencia lo considera “un gran paso”

El Valencia CF, ahora, asume las exigencias que le imponen. No le queda otra. Este convenio no tiene margen de negociación. O lo toma o lo deja. Pero el club está en el escenario de garantías jurídicas que tanto venía reclamando y por el que argumentó por ejemplo su negativa a firmar el compromiso con la FIFA para ser sede del Mundial. El Valencia CF, desde hace tiempo, viene diciendo que está preparado para reanudar la obra del Nuevo Mestalla y que tiene un plan económico para finalizar su construcción. Es hora de demostrar lo primero y concretar lo segundo, un asunto financiero que pasa por CVC, la venta del terciario de la parcela de la Avenida de las Cortes y un préstamo que sufragar a posterior con los mayores ingresos que calcula que le supondrá el traslado a una nueva casa, además de la futura venta de la parcela del actual Mestalla, una cuantía que debe ir destinada a reducir la deuda del club.

Comunicado oficial del Valencia

“Este martes, el Pleno del Ayuntamiento de Valencia ha dado el visto bueno a la modificación del Plan de Actuación Territorial Estratégica (ATE) que afecta tanto a la zona urbana A ‘Antiguo Mestalla’ como a la B ‘Corts Valencianes’, incluyendo las fichas de gestión en ambas, con 28 votos a favor y 4 en contra.

De esta forma, se completa un proceso de más de un año desde que se sometieron a consulta pública las referidas fichas y supone otro gran paso de cara a convertir en realidad el Nou Mestalla, después de la aprobación de la Licencia de obras concedida el pasado día 12 de julio.

El Valencia CF ya está trabajando tanto con la empresa constructora como con el estudio de arquitectos para que se reinicien las obras del Nou Mestalla en el plazo máximo de 6 meses”.

Juan Giner, concejal de Urbanismo:

“Se ha llegado a un acuerdo con absoluta mayoría. No han habido reuniones secretas con nadie. Es un escenario de rigor, transparencia y ordenación jurídica. Se ha podido regular legalmente las condiciones de estas fichas. Lo hemos hablado con todos los partidos y a nosotros nunca, nunca, nunca nos llamaron en cuatro años cuando estábamos en la oposición”

“Se aprueba para que el Valencia no tenga barra libre, para que tenga unas obligaciones y unas exigencias para reanudar la obra y acabarla, se imponen penalidades grandes. Se imponen avales y garantías y el Valencia CF deberá cumplir con el barrio de Benicalap con el polideportivo o no tendrá fichas urbanísticas y también una cubierta fotovoltaica”.

“Es bueno que se alcance un consenso en un asunto que va más allá de un alcalde y es un ejercicio de responsabilidad”.

Papi Robles, portavoz Compromís.

“Vaya por delante que para nosotros el lugar en el que tiene que estar el Valencia CF es el Mestalla. La viabilidad deportiva del Valencia pasa por no cambiar de estadio, pero eso no lo podemos decidir nosotros, porque el propietario del club pasa por encima de los intereses del club, ha pedido una licencia para una operación de especulación que ya intentó bajo el anterior gobierno del PP, nosotros teníamos que elegir ser cortafuegos a un negocio inmobiliario a Lim o vía libre, y preparamos un convenio que dijera muy claramente que los intereses del Valencia pasaran por delante de los intereses urbanísticos de Lim o quien sea. ¿Las fichas son la mejor solución? La mejor solución es que todo lo que haga el Valencia responda a los intereses deportivos del club, este es el menor de los males. Necesitamos marcarle al Valencia cada paso y en qué vamos a hacer si hay algún incumplimiento, tirando atrás cualquier derecho urbanístico. El mejor de los casos sería que los aficionados fueran los propietarios, porque seguramente no se irían de Mestalla”

Borja Sanjuán, portavoz de PSPV-PSOE

“Esta moción es prácticamente idéntica a la que presentamos hace tres meses y si María José Catalá las hubiera apoyado, probablemente tendría más opciones hoy de ser sede del Mundial. Pedimos exactamente los mismos avales previos. La diferencia es que en aquel momento el gobierno actual se encargó de cambiar decía que el aval no se podía ligar a la licencia. De hecho, la licencia ya está concedida. Lo que hacemos ahora es ligar el aval a los beneficios urbanísticos, que es el momento más exigente que los servicios jurídicos han entendido que era posible. Lo que nosotros aprobamos hoy no es el mejor escenario, pero evita el peor de los escenarios y es el más exigente y compatible con la legalidad”.

Juanma Badenas, portavoz de VOX

“No tiene ningún sentido reconocer esos derechos urbanísticos y por eso hemos votado que NO, mas cuando Valencia ya no va a ser sede del Mundial”.

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