Ni solución ni relevo
Mendy sale señalado de Vila-real tras un verano en el que el club valoró su traspaso. Pero Ancelotti está atado a él: no tiene otro lateral izquierdo específico en la plantilla, sólo parches.
El partido del Real Madrid en Vila-real no deja un único señalado; la derrota blanca se debió a un fallo en cadena, con especial relevancia en la defensa, pero que también afectó a la media y al ataque. Sin embargo, un futbolista quedó especialmente tocado tras el traspié de La Cerámica: Ferland Mendy. El lateral izquierdo blanco prácticamente regaló el 1-0 al Villarreal y fue sustituido por Ancelotti a la hora de partido, dando entrada a Lucas Vázquez y provocando un corrimiento de tierras en la zaga que terminó con Alaba haciendo ese rol.
Con las estadísticas en la mano, el partido de Mendy fue sólo discreto: dio bien 23 pases de 26, el 88%; ganó dos duelos de dos; recuperó cuatro balones; y perdió otros cuatro. Pero su actuación perdió todo el peso al inicio de la primera parte, cuando regaló un balón al Villarreal en campo propio que terminó con el 1-0 de Pino. A eso se sumaba el trabajo que le estaba dando Chukwueze, muy activo y que amenazaba con hacer más daño con el Madrid más abierto, en busca del empate.
De todo eso tomó nota Ancelotti para retirarle del campo a la hora de encuentro; el italiano no quiso dar nombres concretos tras el partido, señalando a todo el equipo, pero de facto indicó que la defensa no se había sabido manejar bien ante la presión del Villarreal y, con su cambio, puso a Mendy como principal ejemplo de los errores de la tarde en Castellón.
Mendy empezó la temporada entre dudas, sabedor de que su papel en el Madrid no era seguro: tras el fichaje de Rüdiger, en el club apostaban por escuchar ofertas por el francés para, si al final era traspasado, que Ancelotti tirase de Alaba como lateral izquierdo, con el alemán y Militao como centrales y con Carvajal en la derecha. Sin embargo, Ancelotti valora mucho la eficiencia defensiva del francés y desde el inicio del curso le ha venido utilizando como titular, lo que le ha hecho tener que rotar de más a sus centrales para dar encaje a Rüdiger.
Davies amenaza a Mendy
No llegaron ofertas (tampoco era fácil que alcanzasen las pretensiones del Madrid, que en 2019 pagó 48 millones por Mendy al Lyon), el lateral se quedó y la plantilla blanca ahora adolece de cierta asimetría en esa posición: no hay otro lateral izquierdo puro, sólo parches. Rüdiger empezó jugando ahí por indicación de Ancelotti, que pretendía darle minutos a base de hacerle rendir en las cuatro posiciones de la defensa, pero el alemán quiere ser central. Nacho vale para los cuatro puestos, pero su posición predilecta es la de central y si tiene que ser lateral, tiene mejor salida en la derecha, con capacidad para centrar. Alaba, igual que Rüdiger, también está más cómodo como central. Y el Mundial ha abierto una nueva opción con Camavinga, que se desenvolvió como carrilero en Qatar, incluido en la final, con un papel brillante en la selección francesa.
Pero el Madrid ya mira al futuro y valora opciones para reforzar esa posición: como ya informó AS, el elegido es Alphonso Davies, lateral canadiense del Bayern de Múnich, que acaba contrato en 2025 y cuyo fichaje intentará el Madrid en 2024, con la esperanza de que no haya renovado y el club bávaro se vea en la obligación de negociar para no perderlo gratis, como ya hizo con Kroos en 2014. Hasta entonces, Mendy entra en los planes del Madrid y de Ancelotti, pero no se cierra la puerta a darle salida a un jugador de gran fiabilidad defensiva, pero que no termina de llenarle el ojo al Santiago Bernabéu.