Muriqi: “Me siento feliz por ayudar a mis compañeros”
Tras dos partidos ausente por sanción, ha vuelto para volver a marcar diferencias. Su gol en Mestalla abrió las puertas de la victoria de su equipo ante el Valencia una vez que Kang-in Lee anotó después el segundo.
Expulsado en Elche por un manotazo en la cara de un contrario, el kosovar se arrepiente y lo asume: “estoy enfadado conmigo mismo porque por una tontería dejé a mis compañeros sufriendo solos y siempre es mejor sufrir juntos en el campo, y ahora volver con una victoria y con un gol, como delantero, no se puede pedir más”.
Su regreso al equipo bermellón fue vital para el triunfo en Valencia: “estoy contento de volver al equipo y además marcando un gol, me siento feliz por ayudar a mis compañeros con mis goles, teníamos por delante un partido difícil y que ya sabíamos que iba ser así, además llegando al mismo tras cuatro partidos seguidos sin ganar, que es mucho, así que esta victoria nos viene muy bien, nos da confianza”.
La próxima cita de los mallorquinistas será en Palma contra el Espanyol, al que también le está costando arrancar, pero, aun así, Vedat Muriqi afirma que “el Espanyol será más difícil que el Valencia, para reforzar estos tres puntos de Mestalla, hay que sumar otros tres antes de jugar contra el atlético de Madrid”.
Muriqi ha caído de pie, se ha metido en el bolsillo a la afición de la isla y también a sus compañeros, no en vano, Dani Rodríguez habla muy bien del kosovar: “tenía ganas de volver tras la sanción, y tenía muchas ganas de volver a marcar gol, cuando te equivocas de esa manera (en referencia a su expulsión) siempre tienes ganas de volver a jugar lo antes posible y la verdad es que siempre hace un trabajo impresionante, estoy inmensamente feliz por él, es un gran amigo mío y me alegro mucho por él y por el grupo”.
Hasta la fecha, Vedat Muriqi ha contribuido al equipo con cinco goles (tres de cabeza y dos de penalti, sus dos grandes especialidades, aunque falló una vez desde los once metros) además de realizar un trabajo de apoyo y presión en el terreno de juego en segundas jugadas, fundamental para momentos de bloqueo o de dominio del equipo contrario que liberan a su equipo de situaciones comprometidas. A parte de la expulsión, el kosovar también ha visto dos cartulinas amarillas en sus disputas en el juego aéreo.