Montilivi: de la locura del ascenso a la tristeza del descenso
El Elche regresa por primera vez a Girona desde que logró subir a Primera División en ese estadio; ahora los catalanes están mitad de tabla mientras que los franjiverdes cuentan las jornadas que restan para bajar a Segunda.
El Elche regresará este sábado a Girona, ciudad en la que logró su último ascenso a Primera División. Fue un 24 de agosto de 2020, en plena pandemia, cuando el equipo de José Rojo ‘Pacheta’ logró un éxito tan rocambolesco como merecido. Los ilicitanos no entraban en las quinielas iniciales de candidatos a subir, pero se lo fueron creyendo, poco a poco, hasta superar cuantas adversidades se le cruzaron por el camino.
Aquel partido en Montilivi ha sido el último que el Elche ha disputado en Girona. El conjunto catalán se quedó a las puertas del ascenso esa campaña y necesitó de dos más para, por fin, alcanzar su objetivo. Esta temporada ha regresado a Primera División y sólo hay que ver cómo han cambiado las cosas. Ahora el Elche es el que se lame sus heridas mientras que los de Míchel disfrutan de su cómoda posición en mitad de tabla, con 35 puntos, virtualmente salvados. Ganar el domingo supondría alcanzar los 38 y comenzar a pensar en la próxima temporada, como ahora hace el Elche pero pensando en una categoría más abajo.
Todavía no han pasado ni tres años y parece un partido de otra vida. Desde entonces, por el banquillo del Elche han desfilado hasta siete entrenadores diferentes: Jorge Almirón, Fran Escribá, Francisco Rodríguez, Sergio Mantecón, Alberto Gallego, Pablo Machín y ahora Sebastián Beccacece, contando con las segundas partes experimentadas en las carnes de Almirón y Mantecón.
En la plantilla del Elche se mantienen varios jugadores que vivieron aquel partido: Edgar Badia, Gonzalo Verdú, Fidel Chaves, Josan Ferrández y Pere Milla. Jony Álamo, ahora en el filial para recuperar el ritmo de competición, estuvo en el banquillo. Nino es ahora el segundo entrenador del Elche Ilicitano. Y Christian Bragarnik, Joaquín Buitrago y Sergio Mantecón siguen como dueño, presidente y secretario técnico del club franjiverde. En el banquillo del Girona, junto al extécnico franjiverde Francisco, también estaba Gerard Gumbau, que no tuvo minutos.
Ahora el Elche se cambiaría por el Girona, al igual que el Girona se hubiese cambiado por aquel Elche y el de las dos temporadas siguientes. El fútbol tiene estas cosas, aunque para los supervivientes de aquel encuentro dolerá regresar a un escenario donde lograron una de las mayores alegrías y hazañas de su vida deportiva mientras que ahora agonizan, en la recta final de la temporada, a la espera de saber cuándo se confirmará el descenso a Segunda División.