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LAS PALMAS

Moleiro levanta la voz

El 10 de Las Palmas, tan decisivo como el que más jugando como interior. Ante el Betis ‘asistió’ a Suárez e hizo el definitivo 2-2. Los Juegos, cada vez más cerca.

Las Palmas
Alberto Moleiro.
Carlos Diaz-Recio

Diluida como un azucarillo desde hace tres meses, la Unión Deportiva Las Palmas se plantó el jueves, antes del partido contra el Betis, con la esperanza en números rojos y la moral por el subsuelo. No solo acumulaba 11 partidos consecutivos sin ganar y ocho derrotas del tirón sino que, además, el Cádiz le ganó el día antes al Sevilla, lo que cercaba por completo a la hueste grancanaria, totalmente acorralada y sin apenas vías de escape.

Tampoco es que deba celebrarlo en exceso, pero el punto que le arrancó al Betis despeja mínimamente el escarpado camino hacia la salvación de Las Palmas, que cada vez depende menos de sí misma. Tocaba, en cualquier caso, reaccionar. O al menos intentarlo de verdad. Había que levantar la voz como bien hizo Alberto Moleiro, verdadero portavoz futbolístico de los suyos.

Tampoco es que al joven 10 de Las Palmas, apenas 20 años ha podido celebrar, le haya ido mal como extremo izquierdo, allí donde más le ha utilizado Pimienta, siempre a pierna cambiada, inamovible como parece el 4-3-3 en los planes del entrenador de la formación insular. Sin embargo, en público y en privado, no tenía reparos Moleiro en reconocer que se siente más a gusto jugando por dentro, más allá de la libertad absoluta que tiene desde la banda para hacerlo, como así lo ha manifestado su propio jefe.

Ocurre que como volante, acompañando a Kirian y Loiodice en esa primera línea de tres, cuajó un partido sensacional ante el Betis. Capital en todas las acciones de riesgo de Las Palmas, fue un verdadero martillo pilón para la defensa dispuesta por Pellegrini, zafándose siempre de cualquier trampa que se le viniera encima. Ligeramente escorado a la izquierda, en el primer tiempo martirizó a Ruibal y le sirvió en bandeja el 1-1 al siempre atento Álex Suárez.

Y en el segundo, cuando peor lo pasaba su equipo, fue el primero en dar ese necesario paso al frente. Protagonizó cada acción de peligro, y definió a la perfección ante Rui Silva para hacer el 2-2 tras una estupenda asistencia de Loiodice. Con este, Moleiro suma ya tres goles ligueros, igualando así su mejor registro como profesional, el de su debut, en el curso 2021-22. Empatado con Munir y Marc Cardona, de entre sus compañeros solo Kirian ha marcado más que el (seis). Junto con Sandro y Javi Muñoz sí que lidera la clasificación de asistencias de Las Palmas: tres.

Tras empezar la temporada, la de su debut en Primera, casi dos meses tarde por una lesión muscular, su protagonismo va en aumento. Y ahí sigue. Acumula, a falta de 180, 1.633 minutos sobre el césped en 26 partidos, 19 de ellos como titular. En tiempos de Juegos Olímpicos, estando siempre en la órbita de la Selección Sub-21, Moleiro oposita con ganas. Pero antes le esperan Cádiz y Alavés, donde debe ser, de nuevo, uno de los portavoces de su equipo sobre el césped. Es lo que le toca al jugador de más talento puro de la Unión Deportiva Las Palmas.

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