Míchel se fija en Sergio González
El Cádiz, la temporada 2022-23, también sumaba los mismos 7 puntos que ahora el Girona y no cesó a su técnico. Encontró el premio de la permanencia.
Hay diferentes maneras de ver el fútbol. Y es que, como en la vida, existe la parte positiva y la negativa. El Girona y, especialmente, Míchel Sánchez apuestan por la primera: siempre positivo, nunca negativo. El vallecano está viviendo su peor momento como entrenador del Girona en Primera y pese a dice sentirse “fuerte”, los resultados le están restando crédito. El sábado, contra el Alavés (14:00), se juega su futuro.
El Girona, colista con siete puntos, está inmerso en una crisis de resultados (únicamente ha vencido un partido esta Liga) de la que debe intentar salir cuanto antes. Eso sí, desde el club se llama a la unidad. Esto pasa, primero, por hacer un frente común entre directivos, cuerpo técnico, jugadores y aficionados y remar hacia la misma dirección. Míchel, de momento, cuenta con la confianza de todas las partes y se confía en que, más pronto que tarde, será quien logre enderezar el rumbo.
Además, tiene espejos en los que mirarse. Uno de ellos está en Sergio González, cuando dirigió al Cádiz la temporada 2022-23. El entrenador catalán de 48 años, aquella campaña, logró aguantar en el cargo durante toda LaLiga pese a un arranque, igual que el de Míchel, repleto de dudas. Tras las primeras 11 jornadas también cosechó solo siete puntos con una dinámica idéntica: un triunfo, cuatro empates y seis derrotas. La directiva gaditana le mantuvo en el cargo, confió en él y acabó dándole la razón: selló la salvación.
Se trata de una campaña que Míchel y el Girona también sufrieron porque pisaron los puestos de descenso (jornadas 10 -con 8 puntos- y 11 -9 puntos-). La segunda victoria de Sergio González, aquel curso 22-23, llegó en la jornada 12, ante el Atlético de Madrid (3-2). Míchel, en la jornada 12 (la de este fin de semana) recibirá al Alavés y se anhela, también, un triunfo en Montilivi.
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El Cádiz de Sergio González tuvo final feliz al culminar la temporada con 42 puntos, dos de margen respecto a un descenso que sufrieron Valladolid (40), Espanyol (37) y Elche (25). El Girona también logró reconducir su situación y acabó en décima posición con 49 puntos. Hay ejemplos en los que fijarse y calcar. Pero todo pasa por ganar cuanto antes.
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