Míchel cierra el círculo
Hace dos temporadas, en la jornada 12, el Girona estaba en descenso a 1a RFEF. Hoy es líder en solitario de Primera. El club apostó por él, incluso en el peor momento.
El Girona, tras 12 jornadas de Liga, es líder en solitario de Primera División. Una hazaña, una proeza, una gesta por sí sola, la consecuencia de muchos aciertos y pocos errores y de un equipo que cree en lo que hace. Aventajan a Real Madrid y Barcelona, son el equipo que más goles ha marcado y, más que probablemente, el que mejor juega de toda la competición. Un mérito enorme, mayúsculo, que coge una perspectiva nueva si se echa la vista atrás. Y no hace falta irse muy atrás (hasta 2008 ni siquiera jugaban en el fútbol profesional) sino tan solo hace dos temporadas. En la 21-22, el primer curso de Míchel en el banquillo, el Girona estaba a estas alturas en un lugar muy distinto. Tras 12 jornadas era el decimonoveno clasificado de la Segunda División, es decir, en puestos de descenso a Primera RFEF.
Entonces… ¿Cómo ha llegado el equipo en solo dos años a ser el inesperado líder de Primera? Esta es una pregunta que tiene muchas respuestas, todas conectadas, en la que cada uno puede poner el foco donde quiera. Los fichajes, el estilo, la afición, las ventas… Pero donde no hay discusión es en la figura de Míchel. Él ha sido el principal artífice de llevar a este Girona hasta cotas nunca antes imaginadas y lo ha hecho porque ha gozado de la confianza de la dirección deportiva y la directiva. Ahí es donde está la clave. Con el equipo hundido en puestos de descenso a Primera RFEF no solo no se dudó de él, sino que se le renovó. Quique Cárcel creyó que era el mejor entrenador posible para el equipo y no se dejó nublar por los malos resultados. Dobló la apuesta en el peor momento. Y le salió cara. Ya en su primera temporada lograron ascender vía playoff, en la segunda se consolidaron en Primera (rondaron incluso los puestos europeos) y en esta tercera se han encaramado a lo alto de la clasificación.
La sensación ahora mismo en Girona es que todo es posible. Ganar el campeonato parece muy complicado, pero ya llevan más puntos que el Leicester que asaltó la Premier en 2016. Superar a los dos grandes parece una utopía, pero ya les sacan puntos. Decía esta semana Eric García que algún día dejarán de ganar, que una tarde la pelota no entrará, pero son ya 10 victorias en 12 partidos. Ahora tienen por delante un partido en Vallecas, siempre complicado, en el que el Girona buscará la que sería la sexta victoria consecutiva a domicilio. Una barbaridad.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.