Menos sanción al Chimy por su entradón que al delegado por protestar

El Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha acordado imponer una sanción de un partido a Chimy Ávila tras su entradón, con los dos pies por delante, sobre el tobillo derecho de Berenguer el pasado sábado en el Osasuna-Athletic. El mismo castigo que Sancet por la doble amarilla tras derribar a un contrario en el 48 y, en el 60, un encontronazo con David García en el minuto 60.

El entrenador rojillo, Arrasate, censuró la actitud el Chimy: “Pedimos perdón, esto no es Osasuna”, aunque el presidente Sabalza aludió a que sólo era “un lance del juego”. El año pasado ya protagonizó una feísima acción que pudo hacer mucho daño a Nico Williams. Les aplican multas de 600 y 350 euros para él y el club, en aplicación del artículo 130.1. Lo curioso del caso es que Iñaki Ibáñez, delegado del Osasuna, ha sido castigado con dos partidos de suspensión por salir del área técnica y protestar airadamente al árbitro auxiliar. Una vez expulsado lanzó: “Ya me voy, joder, ya me voy joder”. Además, Antonio Puertas, delantero del Granada, también fue expulsado en el último partido de la jornada, que en el que su equipo recibía al Rayo Vallecano, tras una entrada temeraria, en el minuto 85, sobre Oscar Valentín que le acarrea la misma sanción que al Chimy.

Por otro lado, Bilbao Bizkaia Harro ha condenado los insultos homófobos que recibió Unai Simón en El Sadar y ha exigido a la Fiscalía que actúe de oficio. En un comunicado, la plataforma en defensa del colectivo LGBTI vasco, ha expresado su apoyo al portero, también ha mostrado su “sorpresa por el silencio institucional” del Gobierno de Navarra, del Ministerio de Igualdad y de las instituciones deportivas “ante una actitud deplorable”. Por todo ello, ha reclamado que se adopten medidas disciplinarias “contra quienes prefirieron insultos”, y ha pedido a la Fiscalia que actúe de oficio.