Menos es más para Marvin Park
Cedido por el Madrid, en Las Palmas juega más de extremo que de lateral, donde la producción sube. Araujo o Suárez le cierran la puerta atrás.
Marvin Park es uno de tantos hijos de la cantera de la cantera del Real Madrid que ha tenido que emigrar en un busca de su lugar en el fútbol profesional. El futbolista de origen nigeriano llegó incluso a debutar en el primer equipo blanco con Zidane en el banquillo y ahora se gana la vida, y muy bien, en la Unión Deportiva Las Palmas. Ya con hechuras de jugador de élite, cumple la profecía de García Pimienta. “Es un futbolista de 30-35 partidos por temporada en una categoría superior”, dijo el curso pasado el entrenador de Las Palmas, que militaba en Segunda División también con Marvin en sus filas.
Una vez adaptó su cuerpo a las exigencias físicas del futbol profesional, dejando así atrás su propia retahíla de problemas físicos, Marvin se fue haciendo un poco a poco un hueco en la élite con Las Palmas en la presente temporada, la segunda que reside a préstamo en Gran Canaria. Tanto, que la entidad grancanaria ya se mueve para ejercer la opción de compra que tiene pactada con la entidad blanca.
La polivalencia del canterano del Madrid bien vale un potosí para Las Palmas. Con una súper población tanto en el lateral derecho (Araujo, Lemos, Curbelo o Álex Suárez) o un trecho más arriba (Pejiño, Munir, Moleiro, Marc Cardona o Sandro se han dejado caer por ahí), las cualidades físicas de Marvin, un futbolista especialmente veloz, le daban a su equipo variantes en ambos puestos que no poseen ninguno de sus compañeros.
Le tocaba, pues, decidir a García Pimienta, que parece tenerlo claro: en su plan de juego, el 2 de la UD es preferido como extremo derecho. Marvin ha estado presente en 24 de las 30 jornadas ligueras. Fue titular en 11, y en nueve de ellas lo hizo partiendo desde uno de los costados del ataque de Las Palmas. Acumula en total 1.317 minutos sobre el césped, formando así parte del núcleo de pretorianos indiscutibles de su entrenador.
Sin embargo, el rendimiento de Marvin Park aumenta, acaso convirtiéndose en un jugador más productivo para su equipo, cuanto más atrás juegue. Como confirma la métrica de Besoccer (gráfica superior), por cada 90 minutos jugados, el futbolista de Las Palmas se encuentra entre los 10 mejores laterales derechos de LaLiga EA Sports. El joven de origen nigeriano demuestra su gran potencial ofensivo con las 13,55 progresiones que intenta con balón que intenta y las 4,88 que acaban con éxito, cuando las medias de la categoría son 5,51 y 1,37, respectivamente. No se le puede negar su capacidad para llegar a la línea de fondo y alzar la cabeza, uno de las principales misiones encomendadas por García Pimienta: intenta 6,51 centros por partido pero cuesta encontrar un rematador, pues el éxito no pasa del 16,67%. Sin ser un gigante (177 centímetros), se pelea con quien haga falta para, desde el costado derecho de la zaga, ganar el 50% de sus duelos aéreos. Probablemente pierde más balones de los que debería, 7,59 por esos 90 minutos de juego, y le cuesta mucho sacarle rédito a los 5,96 duelos defensivos a los que de media se enfrenta.
En cambio, pese a que acumula mucho más tiempo de juego como extremo que como lateral, su aportación se reduce cuando está incrustado en la banda derecha del ataque de Las Palmas (imagen superior). Su impacto se reduce automáticamente. Así, en comparación con los mejores extremos de la competición, solo come en la mesa de los que más pases intentan gracias a sus 33.29 por partido, desde luego beneficiado por el tipo de juego de su equipo, al que solo el Barça supera en porcentaje global de posesión del balón. Tampoco es de que lo más pelotas pierde pero le cuesta más de lo deseado progresar con el balón, a veces sin ir al compás sus ligeras y veloces piernas con la infinita capacidad pulmonar de la que puede hacer gala. Probablemente por la mayor posibilidad de arriesgar, pierde más balones en lo alto de la banda que en el otro extremo.
Si contra el Barcelona fue titular, un poco antes, contra la UD Almería fue suplente pero sustituyó a un delantero como Munir en el descanso. Lo mismo que en San Mamés, cuando saltó en el minuto 55, ahora por Moleiro. Ocupó, de nuevo, un puesto en ataque. Como tantas veces esta temporada. Pimienta tiene otras preferencias para el puesto de lateral derecho, como Álex Suárez o Julián Araujo. Este último se encuentra lesionado, quién sabe si volverá a jugar este curso, y no estará el domingo que viene contra el Sevilla. Lemos ya está recuperado pero no cuenta demasiado, mucho menos Eric Curbelo, que tantas veces jugó ahí. Los números no lo son todo pero un fútbol medido hasta el milímetro no son para mirar solo por encima. No parece, en cualquier caso, que de momento haya mucho en debate ni siquiera en defensa, donde las estadísticas avalan una mayor apuesta por Marvin Park. Y es que, en su caso, menos es más.
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