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Luiz Henrique, ante el Congreso de Brasil por las apuestas

La Comisión Parlamentaria de Investigación de la Manipulación en el Fútbol pide la comparecencia del jugador del Betis y de Paquetá, ambos investigados.

Luiz Henrique.
ULISES RUIZAFP

Luiz Henrique da Silva, extremo del Betis, ha sido citado a declarar por una comisión del Congreso de Brasil debido a su posible implicación en una trama de apuestas ilegales. Luiz Henrique comparecerá junto a su compatriota Lucas Paquetá, del West Ham, que es otro de los sospechosos. Ramon Menezes, seleccionador del equipo olímpico brasileño, comunicó el pasado viernes que el jugador verdiblanco no formaba parte de la convocatoria por este motivo. Luiz Henrique se encuentra actualmente lesionado.

Los dos futbolistas intervendrán por videoconferencia tras haber sido denunciados por Sports Radar, organismo que monitorea movimientos sospechosos en las apuestas, en un informe que menciona los partidos West Ham-Aston Villa y Villareal-Betis del pasado 12 de marzo. Ese día se registraron numerosas apuestas ganadoras por un hecho inusual: que vieran tarjeta amarilla tanto Paquetá como Luiz Henrique. Algo que finalmente ocurrió.

Paquetá había sido incluido por su parte en la lista de convocados de la absoluta de Brasil, pero, al igual que con Luiz Henrique, el seleccionador Fernando Diniz aclaró que quedaba fuera por encontrarse bajo investigación. La cosa fue un poco más allá: el traspaso del centrocampista del West Ham al Manchester City, a cambio de 80 millones de euros, también se ha visto frenado porque la FA (Federación Inglesa de Fútbol) revisa estos días el asunto. Ni LaLiga ni la RFEF se han puesto en contacto por el momento con el Betis.

La Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) de la Manipulación en el Fútbol aprobó 18 peticiones presentadas por los diputados que la integran, entre ellos una invitación a declarar a Lucas Paquetá y Luiz Henrique, según desvelan medios brasileños. Los futbolistas habrían tenido que acudir a Brasilia a declarar, pero finalmente se ha optado por la videoconferencia. Si no quisieran comparecer por medios digitales, eso sí, podrían ser forzados a acudir a Brasil.