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BETIS

Luiz Felipe, entre el aprendizaje y la puesta a punto definitiva

El central bético volverá tras el parón con un final de temporada por delante para cumplir la palabra dada a Pellegrini de que no volvería a ser expulsado

Luiz Felipe dialoga con Pellegrini.
TONI RODRIGUEZDiarioAS

Luiz Felipe, central del Betis, confirmó esta semana en un acto del club que estaría disponible para Manuel Pellegrini una vez concluido el parón de selecciones. Al ex de la Lazio le queda por delante un final de temporada en el que tiene dos cuentas pendientes que saldar, ya que lo han estado lastrando durante todo el año.

La primera, no volver a ser expulsado. Tres cartulinas rojas ha visto Luiz Felipe en 14 partidos de Liga, una cifra desorbitada sobre todo si se compara con su trayectoria. Porque en 104 encuentros en la Serie A sólo tuvo que abandonar el césped antes de tiempo por una decisión arbitral en una ocasión. “Ya dije que lo había hablado con Pellegrini y que no iba a pasar más. Tengo mucho que aprender todavía pero no va a suceder otra vez”, afirmaba esta misma semana.

La otra cuenta pendiente tiene que ver con las lesiones. Los problemas musculares han sido una constante durante toda la temporada para Luiz Felipe. Lesionado en Old Trafford, su dolencia más reciente, Luiz Felipe fue baja tanto en la vuelta ante el Manchester United como en los partidos ligueros ante Villarreal y Mallorca. Ya le había ocurrido con anterioridad, a lo que hay que sumar que no pudo jugar en las dos primeras jornadas del campeonato liguero por no poder ser inscrito. Esto ha provocado que tanto Pezzella como Edgar hayan jugado más que él, siendo Víctor Ruiz el único central menos utilizado por Pellegrini.

El consuelo para el Betis es que, a tenor de los resultados, tampoco se puede decir que se le haya echado de menos en exceso. En las 12 jornadas que Luiz Felipe no jugó, el Betis acumuló seis triunfos, cuatro empates y sólo dos derrotas. Pero en las 12 jornadas que quedan su concurso sin incidencia alguna, ya sea por tarjetas o lesiones, se antoja definitivo para la consecución de una plaza en la próxima Liga de Campeones.