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CELTA 1 - SEVILLA 1

Luís Campos explota contra De Burgos: “Eres muy malo”

El director deportivo del Celta arremetió contra el colegiado vasco al término del encuentro en el túnel de vestuarios y éste lo reflejó en el acta.

La tensión del transcendental partido que disputaron Celta y Sevilla continuó una vez finalizado, con protestas por parte local al colegiado del encuentro, De Burgos Bengoetxea. El árbitro vasco fue increpado en el acceso a vestuarios por el director deportivo del equipo vigués, Luís Campos, tal y como refleja el acta arbitral.

En el apartado de otras incidencias, De Burgos describe las protestas del secretario técnico portugués: Una vez finalizado el encuentro y en el acceso al vestuario arbitral, una persona identificada por el delegado local como don Luís Filipe Hipólito Reis Pedrosa Campos, asesor externo del club, se ha dirigido a mí a voz en grito y en repetidas ocasiones: “!Muy malo, muy malo, el árbitro es muy malo!”.

Campos no fue el único miembro del Celta que se quejó de la actuación del árbitro, pues tanto el entrenador, Carlos Carvalhal, como el capitán del equipo, Hugo Mallo, fueron amonestado durante el encuentro por protestar. Los vigueses reclamaron ostensiblemente tres acciones polémicas del partido. En primer lugar, solicitaron la segunda amarilla a Carmona por una clara falta sobre Cervi cuando el argentino se internaba en el área. El zaguero sevillista, que vio la primera amarilla a los nueve minutos, se vio claramente superado por el extremo céltico e impidió su avance hacia la línea de fondo con una clara zancadilla que De Burgos castigó con libre directo y nada más. Eso ocurrió en el minuto 21.

En la primera parte, los locales también reclamaron penalti por una mano de Rafa Mir dentro del área, acción que De Burgos explicó sobre el césped diciendo que había visto la acción y el contacto del balón en la mano del jugador sevillista, pero que no era punible de ser señalada con falta y, por lo tanto, penalti. En la segunda parte, Carles Pérez también reclamó la pena máxima en una internada dentro del área en la que acabó en el suelo. El catalán chocó con Gudelj antes de caer, pero el serbio le arrebató antes limpiamente el balón.