Los retos que tiene Iñigo Pérez
El técnico se estrenó con un punto contra el Madrid. El navarro afronta varios retos. El principal, confirmar que estos brotes verdes han llegado para quedarse.
La nueva era de Iñigo Pérez promete. El técnico franjirrojo se estrenó con un valioso empate contra el Real Madrid y dejó alguna pincelada de lo que va a ser esta nueva etapa. El navarro, de 36 años y 31 días, se coló en el podio de los entrenadores rayistas que han debutado más jóvenes en Primera: sólo le superan Chato González (34 años y 242 días) y Marcos Alonso (36 años y 21 días). Su ilusión superó con creces los nervios y la inexperiencia. Tanto fue así, que su optimismo contagió tanto a sus jugadores como a la grada. Ahora los franjirrojos tendrán que confirmar esos brotes verdes a lo largo de las trece jornadas que restan de Liga. Su primera estación será Montilivi. Para asaltar el feudo del segundo clasificado no podrá contar con Isi Palazón, que además de sancionado, terminó con molestias en los isquios, y Chavarría continúa siendo duda.
Reafirmar la autoestima
Nada más aterrizar, Iñigo Pérez detectó que el factor anímico estaba siendo determinante en el rendimiento del equipo. Le veía frustrado, alicaído, bloqueado... “Tanto fuera como dentro he notado un exceso de tristeza. He intentado levantar al vestuario a nivel emocional, quería que se diera cuenta de que estamos en el camino hacia el objetivo”, comentó el técnico en la previa del Madrid. Lo consiguió. Su Rayo se sobrepuso al gol de Joselu y empató. Ese fue un gran primer paso. “El aspecto mental y esa reacción es de lo que más orgulloso estoy”, confesó tras el 1-1.
Vallecas: victorias y reenganchar a la afición
Esta temporada Vallecas no ha sido el fortín de antaño. El Rayo sólo ha conseguido ganar una vez —contra el Alavés— y hace ya cinco meses. Esos nueve puntos supone el registro más pobre en casa de su historia en Primera. La afición se vio arrastrada también por ese pesimismo. La pancarta de Bukaneros (”Aquí se viene a animar al Rayo, no a ver ganar al Rayo”) y su último vídeo (” A Vallecas sólo puede derrotarla la tristeza”) sirvieron para levantar la moral de la tropa. Por las nubes con la llegada de Iñigo. La hinchada le ve como digno sucesor de Iraola y la ilusión volvió a reinar contra el Madrid.
Recuperar la mejor versión de Isi y RdT
El primer once de Iñigo Pérez fue una declaración de intenciones. Recuperó a Aridane —su compañero en Osasuna—, que se ciñó a sus labores defensivas y no desentonó en el difícil reto de frenar al Madrid. También dio su sitio a Trejo —el capitán sin brazalete y el timón del juego rayista— y provocó el penalti que, a la postre, marcó De Tomás. El delantero volvió a la titularidad y terminó, por fin, con su sequía. Los instantes previos dejaron la imagen de Isi cediendo el balón a RdT, que le agradeció públicamente el gesto. Sacar la mejor versión de los suyos es uno de los ‘debe’ del nuevo míster. “Su gran inteligencia emocional le ayudará a hacerlo”, destacó Kike Barja de su amigo Iñigo.
Reestablecer el ritmo eléctrico
Más allá de las sensaciones, los cambios también se detectaron sobre el verde. El Rayo volvió a apostar por su tradicional 4-2-3-1 y a ser un equipo eléctrico, con presiones altas, canalizando el juego por las bandas... Ya avisó Íñigo en la previa: “Quiero un Rayo que sea valiente, pero organizado, sólido... Debemos ser inteligentes y tener la cabeza fría. Con el 50% de corazón y un 50% de cerebro”. Tenía un plan y salió bien. Es más, por momentos recordó a aquel equipo de Iraola. “Eso es una buena noticia”, admitió el técnico, que no se conformó con el 1-1 y en el 80’ sacó a dos delanteros: Camello y Falcao.
Más goles para los delanteros
El Rayo necesita más pólvora. Y es que actualmente es el segundo equipo menos goleador de Primera con 22 dianas, sólo superado por el Cádiz con 15. Álvaro es el pichichi con seis tantos y se sitúa por delante de los delanteros. Camello suma dos y Falcao y De Tomás, uno cada uno, aunque ambos desde los once metros. El gol de RdT a su ex puede ser el resurgir del Ave Fénix. Iñigo Pérez se ha propuesto recobrar la pegada en general y aboga mucho por la táctica y la estrategia, otro de los aspectos a mejorar ya que los franjirrojos todavía no han marcado ni de cabeza, ni de córner, ni de falta. La pizarra será clave.