Los meritorios de Valverde
Los canteranos Bilbao, Malcom y Padilla tratan de hacerse un sitio en el primer equipo en su estreno en una pretemporada con el Athletic
Cada año se reproduce el mismo proceso. Una serie de cachorros dan el salto en la pretemporada con ganas de convencer al entrenador del primer equipo. Pocos lo logran. Este verano les ha tocado a Bilbao, Malcom y Padilla. Para los tres, están viviendo “un sueño”. De momento, no pudieron estrenarse el domingo en la doble cita ante el Borussia Monchengladbach y Duisburgo, pero aguardan pacientes la oportunidad.
Luis Bilbao llegó a ser citado por Marcelino el 22 de mayo, para el último compromiso liguero, tras jugar con el filial el día anterior ante el Racing. Ha pasado en apenas un año de estar entrenando con el Basconia y disputar partidos decisivos de la Primera Federación con el Bilbao Athletic a ser parte de la expedición del primer equipo en la estadía de Harsewinkel. El cachorro se muestra “ilusionado” en palabras a los canales oficiales del club y “con ganas de dar un paso adelante” en estos duros días de preparación de cara a la temporada venidera: “En un año he pasado de jugar con el Basconia y el Bilbao Athletic y ahora estoy ilusionado entrenando con el primer equipo en Alemania. He estado muchos años en Lezama en todo momento con el objetivo de estar en la primera plantilla. Cada vez está más cerca, por eso, esta experiencia está siendo para mí un gran avance. Aún me queda por dar el paso más ilusionante”.
Malcom ha recorrido el mismo camino que el extremo de Berango. Un año después de comenzar a entrenar con el filial gualdinegro se encuentra en estos momentos realizando los entrenamientos previos al comienzo de temporada a las órdenes de Valverde: “Es mi primera pretemporada con el primer equipo y lo estoy viviendo con muchas ganas e ilusión. En la temporada pasada, por estas fechas estaba jugando en el Basconia. En la medida de lo posible, estoy intentando aprender de los mejores, atendiendo a los puntos fuertes de cada uno”
Por su parte, el guardameta Alex Padilla ha destacado que está viviendo una experiencia que no se la había imaginado nunca: “Si me hubieras dicho hace tres años que llegaría a estar aquí, no me lo hubiese creído. Te hubiera dicho que estás mal de la cabeza. Para mí, estar aquí con los mejores, es un sueño. Estoy muy feliz de aprender día a día”. Junto a ellos, Paredes e Iru completan el grupo de meritorios que sigue dando realce al trabajo que se realiza en Lezama.