Los capitanes rayistas: “Llevar este brazalete es lo más”
La Plataforma ADRV y la Federación de Peñas organizaron un emotivo acto con históricos como Felines, Cota, Alberto, Trejo, Óscar Valentín, Isi, Ana Blanco... y canteranos.
El centenario late gracias al corazón de la hinchada. La afición convirtió este jueves el centro socio-cultural Alberto Sánchez en el epicentro del rayismo con la entrega de los brazaletes de capitán. Muchos históricos —Felines, Cota, Alberto García, Trejo, Óscar Valentín, Isi, Álvaro, Balliu, Ana Blanco...— cedieron el testigo a las nuevas generaciones. A esos talentos en ciernes de la cantera. Entre el público hubo también mucho sentimiento. La tripulación del Santa Inés la formaron representantes de Bukaneros; de las peñas (Planeta Rayista, Rivas, Ossobuco, Clash, Franja Vallekana, Piti, Desperdigaos, Resistencia...); el abonado número 1, Rafael Garrido; la madre y las hermanas del fallecido director de las categorías inferiores, Juan Pedro Navarro; muchos medios de comunicación (Pasión por el Rayo, Matagigantes, Unión Rayo y Onda Cero) y periodistas franjirrojos como Quique Peinado. Incluso el entrenador del primer equipo, Iñigo Pérez, junto a Ángel Dongil y Mariano Madrid, antaño técnicos del fútbol base franjirrojo.
El acto —conducido por el periodista de Radio Marca Israel Herraiz— fue un precioso homenaje a lo que significa ser y sentir el Rayo. Hay tantas maneras, como personas, así lo demostraron todos y cada uno de los participantes. Los primeros en salir al escenario fueron Balliu y Álvaro García, que acaban de estrenar brazalete. “Sabemos lo que representamos. A la afición la notamos siempre y le agradecemos todo lo que hace”, dijo el lateral derecho, a lo que el extremo utrerano añadió: “Que te voten tus compañeros es un orgullo. Este es el equipo de mi vida”. Este Rayo centenario no se entendería sin el Genuine y el Femenino, que han dado los títulos a la entidad. Ana Blanco, que fue canterana franjirroja y llegó a jugar en el primer equipo, se emocionó recordando lo que fue aquella sección: “El Femenino tiene que volver a estar donde se merece”.
El capitán de capitanes y presidente de la Asociación de Veteranos, Jesús Diego Cota, detalló lo que supuso llevar ese brazalete para un vallecano y one club man. “Soy el que más partidos ha jugado en general y en Primera con el Rayo, por eso quiero decir a los canteranos, como lo fui yo, que pueden llegar. Me gustaría que se cuidara más la cantera. Nosotros, los fósiles, teníamos el temor de que cuando nos retirásemos no hubiera jugadores con ese mismo compromiso con la camiseta y los hay. Veo futbolistas que sienten el Rayo de verdad y no hace falta que sean de Vallecas. Ser capitán es una responsabilidad grande y ponerte el brazalete es lo más de lo más”, sentenció Cota entre aplausos.
Del Getafe llegó Alberto García. El catalán más vallecano que ha defendido la portería franjirroja. Él fue capitán en la pandemia, en el ERTE... y uno de los mayores defensores de sus compañeras del Femenino. “Es muy desgastante. Me tenía que haber planteado lo mismo que Trejo, porque puede pasarte factura en lo deportivo”, reflexionó Alberto, que quiso agradecer al Chocota “esa foto manteado en Montilivi”. Y reveló lo que se escondía detrás del negativo. “Acordarte de mí siendo el protagonista de ese partido”, apostilló. Otro de los protagonistas, pero del acto fue Isi Palazón. Transmisor de toda esa implicación y cercanía en el vestuario. “A la gente nueva tratamos de inculcarle los valores del Rayo”, insistió el de Cieza.
El acto terminó con Rafael Garrido entregando ese brazalete, que lucía la leyenda ‘capitán de un Rayo eterno’, al primer equipo y el filial. “No os tenéis que achicar. Nosotros somos los mejores del mundo y quien no quiera escucharlo que se vaya. Buenas noches”, zanjó el abonado número 1, que abrazó uno por uno a Balliu, Álvaro, Isi y Óscar Valentín. El de Ajofrín tenía un as en la manga y lo mostró en su discurso: “Él sabe lo mucho que le quiero. Ha sido un ejemplo para mí. De parte de toda la primera plantilla, queremos entregarte el brazalete porque tú, Trejo, eres nuestro capitán”.
El Chocota destacó muchas cualidades del vestuario, como la solidaridad, el trabajo en equipo... “Los quiero como si fueran familia. Gracias por el cariño que me brindan. Lo daré todo por la camiseta”, prometió el argentino. Caía la noche, pero aún hubo tiempo para que Unai, del Alevín A, entonara La Vida Pirata y para unas palabras de Iñigo Pérez, que sabe lo que es lucir el brazalete. Lo hizo en el Numancia y durante su último partido con el Athletic. “Sin desmerecer a quienes han sido antes y quienes serán después, no podemos tener mejores capitanes. Los nuestros son aquellos que, cuando dejen de ser jugadores, podrán seguir yendo a la grada porque son personas y sencillas. Con gente así nos irá muy bien en el campo”, analizó el míster y timón de un Santa Inés, donde jugadores y afición reman unidos por otros cien años surcando los mares. Por un Rayo eterno.
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