Larsen: “No quiero un entrenador que simplemente me grite”
El punta noruego elogia a Benítez porque “no se vuelve loco si las cosas no salen” y desvela que el técnico madrileño le ha recomendado “que dispare raso”.
Entre los mensajes que Jorgen Strand Larsen recibió tras marcar el pasado jueves su primer con gol con la selección absoluta de Noruega hubo uno que le hizo especial ilusión. Rafa Benítez felicitó al futbolista de la plantilla al que mejor le ha sentado su llegada al banquillo del Celta. El ariete nórdico ha empezado la temporada recuperando la sonrisa que perdió la pasada temporada y en declaraciones realizadas en su país desvela varios detalles del método que tanto le agrada de su nuevo técnico.
“Es un entrenador que se preocupa mucho de que a nosotros también nos vaya bien. Eso lo aprecio”, afirma Larsen, de 23 años, que destaca otro rasgo del carácter de Benítez: “No se vuelve loco si las cosas no salen como él quiere. Se lo toma con calma y trata de mostrarnos el camino correcto. Así es como mejor se aprende. No quiero un entrenador que simplemente me grite”. El delantero no ahonda más en esta cuestión en la entrevista concedida al canal de televisión noruego NRK, por lo que queda en el aire la duda de si sus palabras llevan implícitas un dardo a alguno de los técnicos que lo ha dirigido en los últimos años.
A nivel técnico, el fichaje estrella del primer proyecto celeste de Luís Campos explica el trabajo que está realizando para mejorar en los giros con balón: “En el último mes Rafa se ha mostrado muy preocupado por esto y dice que con simples y pocos toques se soluciona”. Otro aspecto que está puliendo es la definición: “Me ha pedido que dispare raso. No tengo que buscar siempre el ángulo, que es algo complicado. Siento que ya he aprendido mucho de él”.
El consejo “bottom corner” de Benítez para rematar a puerta funcionó en la jornada previa al parón. Larsen marcó en Almería mediante un disparo raso, un tanto al que dio continuidad seis días después en el amistoso que Noruega se apuntó por 6-0 contra Jordania. Sobre su contribución en esa abultada victoria señala que “pensé que tal vez el gol no ayudaría mucho a mi confianza, porque no era el mejor rival del mundo. Pero noto que los hombros quizás ahora estén un poco más relajados”.
Una vez que se ha quitado de encima el peso de estrenarse como artillero con su selección, el punta disputará este martes un encuentro de clasificación para la próxima Eurocopa. El rival será Georgia, el combinado que España arrolló el pasado viernes.