La tortura de Anoeta
El Espanyol solo ha sacado dos puntos en las seis últimas visitas al campo de la Real Sociedad, un termómetro para los blanquiazules que esperan revertir la mala racha este domingo.
El Espanyol, después de dejar atrás la tormenta provocada por el caso Raúl de Tomás, llega a San Sebastián con la sensación de volver a empezar aunque ya se hayan consumido cinco jornadas del campeonato. Con el mercado en el retrovisor, Diego Martínez, a quien este sábado también se le preguntará por la marcha del delantero madrileño, espera que el equipo mantenga el buen acento lejos del RCDE Stadium. Por el momento, los blanquiazules no han perdido: empate ante el Celta en la primera jornada (2-2) y victoria en San Mamés. Pero Anoeta representa un reto más duro.
El conjunto perico visita uno de los estadios más complicados de los últimos años para sus intereses. El Espanyol solamente ha sido capaz de sumar dos de los últimos 18 puntos como visitante, en unos encuentros que fueron también determinantes para sus entrenadores. Los dos empates proceden de la etapa de Quique Sánchez Flores (2016-18), cuando los pericos consiguieron dos 1-1 con distinto sabor de boca. A partir de ahí, se encadenó una racha ruinosa y tortuosa.
En la campaña 2018-19 con Joan Francesc Rubi, el Espanyol cerró la primera vuelta con una derrota por 3-2 que dejó muy tocado al técnico, después de sumar su séptima pérdida en los últimos ocho encuentros. El siguiente encuentro no fue de Liga, sino de Copa del Rey. En la campaña 2019-20 el equipo perico, colista de la categoría, viajó a Anoeta a jugar los dieciseisavos de final. Priorizando la Liga, Abelardo Fernández utilizó un equipo plagado de suplentes. El resultado fue 2-0 para los txuri-urdin, lo que desgastó al técnoco asturiano justo antes de la llegada de la pandemia y de perder gas en la Liga y quedar eliminado de la Europa League.
Erosionado Abelardo, Francisco Rufete dirigió a un Espanyol ya en la lona en la penúltima visita a Anoeta el curso del descenso. Era la jornada 33 y el equipo perico aún tenía opciones de salvarse. Pero cayó por 2-1 en el tramo final con un tanto de Isak, la puntilla a la peor temporada de la historia del club. De aciago recuerdo es la visita del curso pasado, saldada con 1-0 con tanto Isak en el minuto 97 por un penalti discutido. Aquel encuentro fue el principio de una mala racha del técnico valenciano que le costó el puesto a falta de dos jornadas para el final del campeonato.