Atlético de Madrid - Oviedo

La sombra de Futre, ejemplo del último gran Oviedo

Antonio Gorriarán, exdefensa azul, recuerda sus duelos con el portugués: “Ahora hay pocos como él, quizás Lamine y Nico Williams sí deslumbran como Futre”.

Gorriarán posa para AS con uno de sus perros.
Lne_Carmen
Nacho Azparren Menéndez
Nacido en Oviedo en 1983, se licenció en Derecho en la Universidad de Oviedo en 2006 y en Periodismo en la Universidad Carlos III en 2008. Redactor de deportes en el diario asturiano La Nueva España desde 2009. A partir de 2014, el Diario AS confía en él para la corresponsalía de Oviedo, con especial dedicación en la actualidad del Real Oviedo.
Actualizado a

El regreso del Atlético-Oviedo lleva irremediablemente a pensar en otros tiempos, en los 90 sobre todo, la última etapa brillante de los azules en Primera y los años que rodearon al Atleti del Doblete. Y en aquellos enfrentamientos sobresalía un duelo que definía el estilo de uno y otro. Paulo Futre era el descaro de un Atleti que quería codearse con los grandes con un estilo propio. Antonio Gorriarán era un zaguero de armadura, de los de antes, y el más genuino representante de un Oviedo peleón que por entonces se mantuvo 13 años en la élite.

Mucho han cambiado las cosas desde entonces para Gorriarán. Ese zaguero noble pero duro ha evolucionado en escritor. Acaba de presentar su segundo libro, “Fútbol, perros y valores”, junto a José David Rodríguez, un compendio de “las vivencias del fútbol que me tocó con mi mayor pasión, los perros”, dice el vasco, exultante pocas horas después de haber sido abuelo por primera vez.

Atleti y Oviedo vuelven a verse las caras en Liga y a Gorriarán se le dibuja una sonrisa en el rostro. “Mis recuerdos son fantásticos. En lo colectivo logramos vencer en más de una ocasión y en lo personal fueron partidos que me dieron caché”, dice con sorna, en referencia a esos duelos tan sonados con la estrella del Atlético.

Futre era un jugador de talla mundial, de los mejores a los que me he enfrentado. Gil le convirtió en el emblema de aquel Atlético con todo merecimiento”, dice Gorriarán antes de pasar a describir las condiciones del luso: “Rápido, hábil, eléctrico... Tenía un regate que parecía sencillo, pero es que se iba muy fácil. En el fútbol de entonces, con mucho marcaje al hombre, te sacaba de tu zona y ahí sabías que ibas a sufrir”.

Fue Jabo Irureta el que le encomendaba esas arduas tareas de convertirse en la sombra de Futre. En una ocasión, en el Calderón, Gorriarán se tomó tan a pecho su labor que incluso seguía al luso cuando iba a sacar un córner o cuando se acercaba al banquillo a recibir alguna instrucción. También sonada fue la venganza de Futre. Sucedió en la Copa del 92. La leyenda dice que Aragonés irrumpió en la habitación del portugués la mañana del partido blandiendo un periódico con unas declaraciones de Gorriarán en las que presumía de que “Futre ni la tocará”. Luis usó la frase como elemento motivador de un Futre que aquella noche se salió: dos goles y dos asistencias en el 5-0 del Atleti. “Me pasó por encima. Como tiene que ser”, cuenta ahora con deportividad Gorriarán.

Él, por supuesto, se queda con otro recuerdo: “El 5-2 que les metimos en el Tartiere en la 89/90. Eso mostraba que aquel Oviedo era bueno, muy bueno. Ni en los mejores sueños creo que ahora se le pueda meter cinco al Atlético de Simeone”.

Lamenta Gorriarán que hoy en día apenas queden jugadores de la estirpe de su antagonista. “Ahora los equipos pueden estar dos días dando pases, eso lo dominan, pero jugadores con tanto desborde... Lamine Yamal y Nico Williams sí deslumbran como lo hacía Futre. Son virtuosos”, defiende, antes de poner un ejemplo: “En el último Athletic-Oviedo ninguno fue mejor que el rival. Pero se definió en una jugada de Nico. Esa fue la única diferencia”.

Opciones del Oviedo

Gorriarán es de los que, a pesar de lo que dice la tabla, siempre confía en lo que puede hacer el Oviedo. También en el Metropolitano. “Prefiero ser optimista, el pesimista malvive. Pero también hay que ser objetivo. Contra el Rayo, el Oviedo mereció ganar. Está en esa dinámica que, si un par de cosas salieran bien… Me gusta el orden, físicamente están fuertes. Le han faltado detalles”, analiza.

Noticias relacionadas

“Espero a un Oviedo que vaya a competir. Se puede perder, sería lógico, pero que compita, y que ser el último no sea un lastre. Si pierdes, está dentro de la norma porque hay menos presión que en otros partidos”, cierra Gorriarán.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí

Etiquetado en:
Comentarios
Normas

Rellene su nombre y apellidos para comentar

Te recomendamos en LaLiga EA Sports

Productos recomendados