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VALENCIA

La rentabilidad de ‘La Quinta del Pipo’: salarios bajos, valores de mercado altos

El Valencia arranca la pretemporada con la sexta plantilla con más valor de mercado (243,2 millones) y un coste de plantilla por debajo de 70 millones.

Diego López, Javi Guerra, Fran Pérez y Mosquera, integrantes de La Quinta del Pipo.
DAVID GONZALEZ ARENASDIARIO AS

Rubén Baraja ha empezado la pretemporada con la sexta plantilla con más valor de mercado de la Liga. Solo le superan Real Madrid, Barcelona, Real Sociedad, Atlético y Athletic. El mercado dirá quién se queda y quién se va entre los blanquinegros, aunque a día de hoy en el vestuario che se reúnen según Transfermarkt 243,2 millones de euros. Los futbolistas son prácticamente los mismos que hace un año (Amallah, Peter, Yaremchuk y Cristian Rivero por César Tárrega, Rafa Mir y Dimitrievski), si bien, en julio de 2023 el valor de la plantilla más joven de la Liga era apenas de 150 millones, 93 menos que ahora. Sin embargo, el coste de plantilla es inferior al de hace un año: por debajo de 70 millones.

El Valencia lleva cinco años reduciendo de forma drástica el coste de plantilla (salarios más amortizaciones). Y La Quinta del Pipo ha sido una mina para poder hacerlo. Los canteranos le han permitido al club reducir las nóminas y también las amortizaciones. La mayoría de canteranos que han renovado lo han hecho tras cumplir diferentes hitos que tenían en sus contratos (número de partidos con el primer equipo, como fuera el caso de Mosquera o Fran Pérez) y esas ampliaciones automáticas tenían fijados unos salarios que se habían acordado antes de su explosión. Otros como Jesús Vázquez han renovado sin apenas mejora salarial o1por sus ganas de continuar en Mestalla. Esas son una de las razones por las que el Valencia ha pasado de 121 millones de coste de plantilla a menos de 70 en apenas tres temporadas. Las otras dos razones: las salidas y la restrictiva política de fichajes.

El Valencia lleva desde 2020, cuando se metió en el ojo de una tormenta perfecta que le dejó económicamente tiritando por la pandemia del COVID y también por sus decisiones (destitución de Marcelino y salida de Mateu Alemany), quitándose a la mínima que ha podido las fichas más altas: Parejo, Rodrigo, Coquelin, Kondogbia… Carlos Soler, Guedes... o, el último, Gabriel Paulista. Los únicos contratos que hoy quedan en el Valencia que se asemejan a los de antaño son los del capitán José Luis Gayà y Diakhaby. Así es como el Valencia ha pasado de tener una plantilla que le costó 177 millones en la temporada 2019/20 a los 72 de la 23/24.

TemporadaCoste de plantilla (cuentas del club) M€Valor plantilla (según Transfermarkt) M€
2014/1580,4 (53,1 salarios + 27,3 amortizaciones)230
2015/16111,1 (65,1 salarios + 46 amortizaciones)252,5
2016/17114 (64 salarios + 50 amortizaciones)2017
2017/1891 (54 salarios + 37 amortizaciones)395,75
2018/19172 (116 salarios + 56 amortizaciones)492,6
2019/20177 (109 salarios + 68 amortizaciones)426,65
2020/21119 (70 salarios + 49 amortizaciones)275,25
2021/22121 (84 salarios + 37 amortizaciones)310,1
2022/2389 (74 salarios + 15 amortizaciones)219,1
2023/2472 (60 salarios + 12 amortizaciones)150
2024/2565 (60 salarios + 5 amortizaciones) *Sin cerrar243,20 *A fecha de 13 de julio

27 caras nuevas por el precio que costó Cillessen (35 millones)

Pero no solo de salarios ‘vive’ el coste de plantilla, también de las amortizaciones (cantidad pagada de traspaso dividida por los años que firma el jugador de contrato), y ahí el club también ha metido de manera considerable la tijera. ¿Cómo? Con salidas y el cinturón abrochado en los fichajes. 17 de las últimas 27 caras nuevas han llegado a coste cero (14 en calidad de cedido) y por los otros 10 se abonó un total de 35 millones de euros, una cifra que es en lo que se cifró el traspaso de Jasper Cillessen (que incluía en la operación contable con el Barcelona a Neto).

Los futbolistas por los que se ha pagado traspaso desde el fichaje del portero neerlandés (que llegó ese verano junto a Maxi Gómez o, entre otros fichajes, Thierry Correia) son, por orden de precio de transferencia, Marcos André (8,5), Almeida (8) Pepelu (5), Cenk (5), Hugo Duro (4), Foulquier (2,5), Mamardashvili (0,8), Comert (0,8) y Canós (0,25). Ello implica, a tenor de los contratos de los siete jugadores que hay en plantilla por los que se pagó traspaso, que en la actualidad el Valencia apenas amortiza 5 millones de euros anuales, cuando en la temporada 20/21 se contabilizan 49. Y a ello, obviamente, contribuye el hecho de que 11 con dorsal del primer equipo son de la casa.

La drástica reducción en lo que a coste de plantilla se refiere desde la temporada 2019/2020 (177 millones, 109 en salarios y 68 en amortizaciones, según cuentas anuales del club) ha ido en paralelo a un empequeñecimiento en cuanto a resultados deportivos e ingresos ordinarios. El Valencia, tras cinco años sin competir en Europa, se ha quedado fuera por primera vez en el Siglo XXI del ránking UEFA, mientras que el club ha pasado de una cifra de negocio (ingresos por competiciones, derechos de televisión, taquilla, patrocinadores...) de 184 millones el año en el que ganó la Copa del Rey con Marcelino a presentar un presupuesto para el ejercicio 23/24 de 99 millones. Esas secuelas deportivas tratará este curso de revertirlas también La Quinta del Pipo.

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