La redención de Fran García
Tras ser señalado contra el Getafe, el canterano se sobrepuso a una primera parte inmensa de Kubo y fue el principal artífice de la remontada ante la Real con dos asistencias.
Fran García llegó al duelo de anoche con una herida abierta y con serio riesgo de profundizarla. El canterano, que se cocinó durante tres temporadas en Vallecas para regresar a bajo coste y volver a dotar al Real Madrid de un lateral profundo y dañino (Mendy, con todas sus virtudes, no es esa clase de carrilero), tuvo un estreno amargo en el Bernabéu antes del parón: cometió el error que acabó en el gol del Getafe y sufrió la penitencia siendo retirado en el descanso. Con todo, Ancelotti insistió en él ante la Real de Kubo, especialista en exponer las carencias de sus marcadores.
Y durante la primera parte esa habilidad quedó patente, facilitada por el nuevo sistema blanco, que desprotege en gran medida a los laterales. Carvajal sufrió menos gracias a las ayudas constantes (cuando no directamente el intercambio de papeles) de Valverde, pero Fran García contó con Kroos de escudero y el alemán regaló demasiadas veces el flanco izquierdo, con Traoré y Kubo buscando al unísono las cosquillas de Fran García una y otra vez. Así llegó el 0-1 de Barrenetxea, el tanto anulado del nipón y un buen puñado de ocasiones inacabadas.
Pero Carletto parece decidido en su apuesta y la redobló tras el descanso, obteniendo frutos: al minuto de arrancar la segunda parte, Fran García servía a la frontal un balón para que Valverde, con uno de los misiles que convirtió en costumbre el curso pasado, iniciase el camino de la remontada. Una asistencia con la que se sacudió la mala vibra que Kubo le había implantado en la primera parte para sustituirla por atrevimiento. Como el que mostró para regalar también el 2-1 a Joselu: carrera él solo contra el mundo y centro teledirigido a la cabeza del ariete, un caramelo irrechazable.
Finalizó el encuentro con dos ocasiones creadas, cinco centros al área, 32 pases buenos de 34 y seis recuperaciones, méritos que el Bernabéu le reconoció con una sonora ovación cuando Ancelotti le retiró en el 77′ para introducir a Nacho y atar los tres puntos. “Sufrió en la primera parte porque Kubo estuvo bien, pero atacó bien durante todo el partido y dio dos asistencias fantásticas para que ganásemos el encuentro”, comentó Ancelotti después en rueda de prensa.
“Es especial para los que llevamos toda la vida aquí”
Tras el duelo, el canterano valoró su actuación con el carácter que le define: con contención. “Volver al Bernabéu, a casa, y darle el cariño de una forma diferente a la gente, con asistencias... es lo mejor. Es un disfrute increíble jugar aquí, sobre todo para los que llevamos toda una vida aquí”. El de Ciudad Real, que ingresó en el fútbol formativo blanco en 2013, directo al Cadete B, se llevó su primer alegrón en el Bernabéu justo cuando más lo necesitaba.
Porque la pelea por el lateral izquierdo gana enjundia ahora que Mendy está al borde del regreso tras su larga lesión. Hasta ahora, Fran García era prácticamente todo lo que tenía Ancelotti, aunque también ha tirado en esa posición de Alaba y de Nacho. Ahora, con Mendy, quedará a las claras por qué apuesta Carletto: si por la potencia y presencia de Fran García (con los riesgos que ello conlleva) o si por el control que aporta el francés, aun a sabiendas de que el nuevo sistema exige lateral profundos que hagan lo que el curso pasado hacían Vinicius, Rodrygo y Valverde.