La paradoja de Óliver Torres
El extremeño cuaja su mejor inicio liguero como sevillista pero fue el sacrificado para quedarse sin inscribir en la Champions League
El inicio de temporada de Óliver Torres sólo puede calificarse de paradójico. Los números desvelan que, tanto por minutos como por rendimiento, está siendo el mejor inicio liguero del extremeño desde que viste la camiseta del Sevilla. Y, sin embargo, eso no le ha servido para evitar ser el futbolista sacrificado para quedarse sin inscribir en la fase de grupos de la Champions League.
Con dos tantos en las seis jornadas disputadas, Óliver es el pichichi del equipo junto a José Ángel Carmona. No jugó en la primera jornada ante Osasuna, fue el más destacado en las dos siguientes ante Valladolid y Almería, donde marcó, para a continuación, contra todo pronóstico, ver el duelo ante el Barcelona íntegramente desde el banquillo. En las dos últimas jornadas, destacó ante el Espanyol y vio puerta de nuevo ante el Villarreal.
En total, Óliver acumula 286 minutos en las primeras seis jornadas, su cifra más alta desde que llegara a Nervión en 2019. Los dos goles marcados ya igualan su registro goleador de toda la temporada pasada y supera al de la anterior, donde no marcó. En el año de su debut llegó a los seis tantos, tres en Liga y otros tres entre la Europa League y la Copa del Rey.
Pero todo esto, a lo que hay que añadir el haberse destapado como el mejor socio de Isco sobre el césped, no le ha posibilitado ser uno de los inscritos en la Liga de Campeones. Por cuestión de cupos, el Sevilla debía dejar a dos jugadores fuera de la máxima competición continental. Uno estaba claro que sería Tecatito Corona, por su lesión de larga duración, y el otro estaba en el aire. Y aunque si bien es cierto que quizás el centro del campo sea una de las posiciones más pobladas, el Sevilla cuenta ahora mismo en Champions, por ejemplo, con tres laterales diestros (Navas, Montiel y Carmona). Y pese a que Lopetegui reconoció públicamente el bajo estado de forma con el que habían llegado jugadores como Januzaj, han sido elegidos antes que Óliver. Toda una paradoja.