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ATLÉTICO DE MADRID

La nueva realidad de De Paul

El argentino ha desaparecido del mapa tras los dos días libres que le pidió al club por motivos personales. Pese a estar disponible, no jugó ni ante el Brujas ni frente al Girona.

De Paul, en el banquillo durante el encuentro ante el Girona.
De Paul, en el banquillo durante el encuentro ante el Girona.PIERRE-PHILIPPE MARCOUGetty

A De Paul le toca volver a empezar. El de Buenos Aires (Argentina) se encuentra ahora en un momento complicado de la temporada. Y es que su situación ha dado un giro de 180 grados desde el último partido que disputó como rojiblanco. Fue el 18 de septiembre, derbi, último encuentro antes del parón de selecciones. Ese día el 5 atlético partió de inicio y se marchó sustituido en el 62′. A partir de entonces, no ha vuelto a jugar. Como el resto de internacionales, abandonó Madrid para disputar dos encuentros con su país. En su caso, amistosos. Partió de inicio en la victoria de Argentina (3-0) ante Honduras y disputó los últimos 18 minutos frente a Jamaica (0-3). Se le esperaba, como al resto de sudamericanos, en el entrenamiento vespertino del pasado 29 de septiembre. Sin embargo, el argentino no compareció, según el club, por motivos personales.

La enfermedad de su padre llevó al Atlético a concederle dos días libres. No obstante, la polémica llegó cuando en el segundo de ellos, durante la madrugada del jueves 29 al viernes 30, a menos de 48 horas del encuentro ante el Sevilla, se le vio en Miami, en la entrega de los premios Billboard de la Música Latina 2022, acompañando a su pareja, Tini Stoessel, una de las premiadas. Su presencia en el evento, a 7.090 kilómetros de distancia de Buenos Aires, chocó con las explicaciones aportadas por la entidad y con el motivo alegado por el futbolista. Regresó a Madrid el mismo viernes, pasado el entrenamiento, pero ya no entró en la convocatoria. Tras ello, volvió a la lista de convocados en la visita a Brujas, pero ni siquiera saltó a la banda del Jan Breydel para calentar. Se limitó a seguir la derrota del equipo desde el banquillo.

Hasta el parón, un recurso habitual de Simeone

Este sábado, frente al Girona, la situación volvió a ser la misma. Pese a ejercitarse durante buena parte de la segunda mitad, Simeone no le dio entrada. Segundo partido consecutivo sin saltar al verde estando disponible, algo que hasta ahora no había sido ni mucho menos habitual. Si bien es cierto que al ex de Udinese no se le ha podido considerar en ningún momento un fijo del centro del campo, hasta el parón de selecciones acumulaba cuatro titularidades consecutivas en Liga (Valencia, Real Sociedad, Celta y Real Madrid), además de 45 minutos ante el Oporto y otros 45′ en Leverkusen, ambos, eso sí, partiendo desde el banquillo.

Con todo, ahora le toca volver a convencer a Simeone. La nueva ubicación de Witsel en el medio, tras la vuelta a la zaga de la pareja Savic-Giménez, le resta posibilidades de minutos. También la presencia de Kondogbia y la liberación de Griezmann, que puede actuar, de hecho ya lo ha hecho, como enganche en el centro del campo. De Paul no lo va a tener fácil. En el club están disgustados con su desplante y sabe que le toca remar. Tiene el Mundial en el horizonte y quiere llegar rodado, pero va a tener que ganárselo. El Cholo siempre le ha demostrado su confianza, pero no negocia el compromiso, por lo que el día a día marcará su futuro.