La memoria de Simeone con Pubill
El técnico premia el esfuerzo y saca a relucir un día D, el partido contra el Rayo. “Dentro de poco estará en la Selección... pero que no lea periódicos”.
Es un pequeño paso para el hombre... Pero así se forjan las historias con Simeone. Partido a partido, pincelada a pincelada. Y que se amplifica en los jugadores jóvenes. Ir despacito y con buena letra. Le ha ocurrido a los canteranos como Barrios o Giuliano y a fichajes que acabaron explotando. Y con día D que cambian carreras. Algunos más vistosos, como el hat-trick de Griezmann en San Mamés para afianzarse o el doblete de Llorente en Anfield para tirar por completo la puerta abajo y otros que, sin hacer tanto ruido, se quedan en la memoria del Cholo. En el caso de Marc Pubill, acudir en el momento de urgencia. Cuando el Atlético había encajado el 1-2 contra el Rayo a falta de 11 minutos por jugarse.
El catalán, que había disputado 26 minutos en los primeros seis partidos, salió como pedía. Sin temblarle el pulso. Aportando para remontar. Del 1-2 al 3-2 con él sobre el césped. Un partido al que ha hecho constantes referencias Simeone. Ayer la última. “No me olvido de ese partido contra el Rayo. Entró perdiendo 1-2, lo hizo muy bien, se lo agradecí en aquel momento y tengo buena memoria para las cosas buenas y las malas. Ha mantenido la paciencia, ha seguido trabajando en esa posición donde nos hemos quedado mañanas buscando progresar, porque veía que lo íbamos a necesitar en esa posición..." explicaba el Cholo.
Después de aquel día Pubill pasó diez partidos completos desde el banquillo. 900 minutos sin entrar. Pero sin dejar de trabajar e intentar mejorar. Pubill viene trabajando individualmente con el cuerpo técnico, con los ayudantes y los analistas para incorporar los conceptos y el manejo de los espacios en el centro de la defensa. Todas esas mañanas con Simeone que ahora premian. 360 de los últimos 450, los partidos completos contra Oviedo, Athletic, PSV y Valencia. 391 de los últimos 481 si contamos la media hora final que entró a gran nivel contra el Inter. Solo suplente en el Camp Nou.
Allí cayó Giménez. Y, de nuevo, en el momento de urgencia, apareció Pubill. Ahora será difícil sacarle. Ni la amarilla en la primera mitad ante el Valencia hizo dudar a Simeone. En el descanso sustituyó a Nahuel y Pubill pasó al lateral. Para acabar como tercer central. Polivalencia y esa adaptación a cerrar atrás. De un balón largo surgió el gol de Griezmann para ganar el partido. Su primera asistencia como colchonero. Un partido con seis duelos de nueve ganados, nueve recuperaciones (el que más junto a Koke) y siete despejes. Ganando todo por arriba. 39 pases de 45 intentados (86,7% de acierto) intentando romper líneas. Simeone ya le vaticina un futuro cercano en la Selección. Ha liberado al Kraken. Ha aprovechado cada momento y no ha bajado los brazos cuando no ha tenido minutos. Trabajo y más trabajo. Aunque con una recomendación de su técnico. Que no lea estas líneas. Que mantenga los pies en el suelo (“ojalá que no compre los periódicos ni escuche las radios”). Humildad y trabajo. Receta del éxito. Un pequeño paso contra el Rayo que ya fue zancada ante el Valencia.
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