La línea roja de Laporta y Deco
El presidente y el director deportivo del Barcelona no quieren en el equipo a nadie al que le quede sólo un año de contrato.


Joan Laporta, en consonancia con Deco, fue muy claro el pasado mes de diciembre cuando advirtió a Frenkie De Jong y Ronald Araújo que tenían que renovar sus contratos antes del 30 de junio porque no querían que nadie al que le quedase un año de contrato empezara la temporada. “No nos gusta que estén a un año de terminar”, reconoció el presidente azulgrana cuando le preguntaron por la ampliación del centrocampista holandés el lunes en TV3. La situación del central uruguayo, que a punto estuvo de salir a la Juventus en el mercado de invierno, se arregló y renovó hasta 2031 aunque no se pueden descartar movimientos con él este verano.
Para Deco y Laporta esta manera de funcionar es una línea roja porque es totalmente contraproducente tener en la plantilla a un futbolista que a partir del 1 de enero puede firmar por cualquier otro club. Y, teniendo en cuenta el nivel de los futbolistas, lo más probable es que pudieran hacerlo por un competidor directo, ya sea en la Liga nacional o en la Champions. “Lo de De Jong es urgente”, admitió Laporta.
En el club azulgrana son muy optimistas con la continuidad del centrocampista holandés, que una vez superados sus problemas en el tobillo se ha convertido en un futbolista esencial para Hansi Flick, que no contempla perderlo. “Desde hace un par de meses han cambiado sus circunstancias profesionales y lo tenemos bastante hablado. Queremos que continúe, para mí es un jugador clave para que este proyecto funcione”, señaló el presidente.
En términos similares se expresó Deco. “Hay que dejar de hablar del pasado, él no tiene la culpa de ganar lo que gana. Ha dado un paso dentro de su gran nivel. Está involucrado, feliz y motivado. Creo que no se ha sido justo con él. Es un jugador de cara a futuro y si podemos llegar a un acuerdo, llegaremos.
Pero en la plantilla, además de De Jong, hay otros jugadores que terminan contrato en 2026 y que habrá que hablar con ellos. Otro caso que requiere cierta premura es el de Eric Garcia. El defensa de Martorell ha acabado el curso en un estado de forma excepcional y Flick lo quiere en su plantilla sí o sí. Eric se ha destapado como una opción más que válida para el lateral derecho además de cumplir a la perfección como central y medio centro defensivo.

Con un perfil similar (aunque en banda no ha jugado) es Andreas Christensen. También finaliza contrato en 2026 y en el club no verían mal un traspaso si llega una oferta interesante por él. Además, hay que tener en cuenta que llegó con la carta de libertad. Recuperado ya de sus problemas en el tendón de Aquiles, el danés quiere quedarse y tiene pendiente una conversación con Deco y Hansi Flick. Si se queda, antes deberá renovar su contrato. Su caso está muy abierto.
Laporta también quiere ampliarle un año más el contrato a Iñigo Martínez, hasta 2027. El defensa de Ondarroa ha sido clave para el equipo bajo las órdenes de Hansi Flick y, pese a que se ganó un año más de forma automática al jugar un número determinado de partidos, el presidente y el director deportivo quieren que se quede otro año extra.
En lo que se refiere a Marc Bernal y Héctor Fort, tienen contrato hasta 2026 pero ya quedó acordado la prolongación de sus contratos hasta 2029 una vez cumplan la mayoría de edad. En la misma situación está Lamine Yamal, pero en su caso si que se renegociarán las condiciones económicas.
Los últimos casos
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De la plantilla actual también acaban contrato en 2026 el portero Iñaki Peña y Pablo Torre. En el caso del guardameta, su salida se da por descontada. Lo más probable es que el Barcelona le dé la carta de libertad porque difícilmente un club hará una gran oferta por un jugador al que sólo le queda un año y que apenas ha jugado desde que Szczesny se confirmó como el titular. Además, su ficha es otro impedimento.


En el caso de Pablo Torre, el Barcelona debe decidir si lo renueva y lo cede a otro club para que pueda tener minutos o lo renueva y lo traspasa quedándose un porcentaje de una futura venta. En cualquier caso, lo primero que han de tener claro en el club es si al cántabro le ven potencial para ser algún día un jugador apto para tener minutos de azulgrana.





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