Supercopa de España | Athletic - Barça
La ilusión ante el desencanto
El Athletic llega pletórico a la cita. En el vestuario del Barça no esconden su enfado por el caso de Olmo y Víctor. Lamine Yamal jugará y Nico es duda.
Hay maneras de tomarse la vida como maneras de tomarse las competiciones futbolísticas y esta noche en el estadio King Abdullah Sport City de Yeda (20 horas por Movistar) se enfrentan dos muy opuestas (sigue el partido en directo en AS.com). El Athletic de Bilbao, vigente campeón de Copa llega a la semifinal repleto de ilusión. Se ganó el derecho de jugar esta competición tras ganar la Copa del Rey y sacar la gabarra, en LaLiga EA Sports está cuarto en posición Champions a dos puntos de su rival de hoy y ha superado en penaltis el susto de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, el partido en el que Valverde, técnico del equipo vasco, reconoce que es donde peor lo pasa en todo el año. Si el Athletic es ilusión, el Barça es otra historia.
El Barça, por decirlo suave, es un volcán en el que el vestuario empieza a poner mala cara ante la impresentable situación a la que se han visto abocados dos compañeros. Uno, una estrella recién llegada, pero formada en la casa como es Dani Olmo. El otro, un joven como Pau Víctor. Ambos sin licencia para jugar (y no se sabe aún si la obtendrán) y que conectan transversalmente con todos los estratos del camerino. Desde las estrellas consagradas a los jóvenes ilusionados por hacerse un sitio. Todos ellos, entrenador incluido, dejaron claro ayer en la previa que están viviendo momentos que les afectan.
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Son muchos los futbolistas que militaron tanto en el FC Barcelona como en el Athletic Club a lo largo de la exitosa historia de ambos clubes.
El más claro fue Raphinha, capitán y referente del equipo que exigió que los responsable de esta situación la arreglen “cuanto antes” y que reconoció que “si estuviera en otro equipo, viendo lo que le ha pasado a Dani y Pau me pensaría mucho venir al Barça”. Minutos después, sobre el césped, Laporta le echó la charla en público. Y Flick, por su parte, tirando balones fuera, pero reconociendo que la situación les preocupa y les afecta.
Y hablando de entrenadores, el partido también es especial para Ernesto Valverde. Siempre lo es cuando se enfrenta al Barcelona, pero en esta ocasión coincide en escenario y fecha con el último partido que dirigió al equipo blaugrana.
Valverde tenía al Barça líder de LaLiga, perdió (injustamente) la semifinal de la Supercopa en Yeda ante el Atlético y Bartomeu se puso nervioso, los jugadores apretaron y el presidente se fue a buscar a Xavi a Qatar. El intento fue fallido y acabó llegando Quique Setién. Ahí podría marcarse el inicio de una era aciaga para el equipo blaugrana, que tuvo su primer y doloroso capítulo con la derrota en Lisboa por 2-8 ante el Bayern de Múnich, que precisamente entrenaba Hansi Flick. Hoy en el banquillo blaugrana.
Más allá de tema emocional y los recuerdos, el gran problema para Valverde. El problema de verdad, es el estado de Nico Williams, que llegó a Arabia Saudí como el estandarte del equipo vasco y que se fue a dormir sin saber si podría jugar.
Nico Williams no se pudo entrenar con el resto de sus compañeros ayer en Yeda por precaución. Sufre una contusión en su tobillo izquierdo y queda pendiente de evolución. De todos modos, el extremo tiene esperanzas de no perderse la semifinal de hoy ante el Barcelona.
Hace justo un mes se retiró lesionado en el partido de Europa League ante el Fenerbahçe. Tuvo que ser sustituido en el minuto 38 por Berenguer. Notó molestias en su rodilla derecha tras realizar un disparo a portería y se tiró al césped pidiendo el cambio.
Pudo salir por su propio pie aunque con claros síntomas de dolor y cojeando. El 10 lleva un par de años cargados de minutos y eso pasa factura. No tuvo problemas en jugar cuatro días después ante el Alavés. En septiembre frenó por una lesión en el tobillo izquierdo, como ahora, y en octubre por una contusión en la zona sacroilíaca izquierda. Nico quiere jugar ante el equipo que le ha tentado en verano y frente a su amigo Lamine.
El que sí estará seguro, sea como titular o saliendo del banquillo, es el citado Lamine Yamal. Hansi Flick confirmó lo adelantado por AS y el jugador disputará sus minutos al estar recuperado.
En el caso del Barcelona, sin Olmo y sin Pau Víctor, Flick podría introducir ciertos cambios en el equipo de gala. En la portería todo apunta al regreso de Iñaki Peña. Sería raro que Szczesny mantuviera la titularidad estrenada en Barbastro. En defensa regresaría Balde y queda la duda de si en el eje de la zaga regresará Cubarsí o se mantendrá Araújo. En el centro del campo, atención a Gavi, que descansó en la Copa y es casi seguro que forme línea con Casadó, otro que descansó en Copa y Pedri. En ataque, Flick celebrará los regresos de Lamine Yamal y Raphinha junto a un Lewandowski que tiene en esta competición muy afinada su puntería.
En el Athletic, Valverde tiene a todos los jugadores disponibles, pero el técnico no quiere hablar de títulos ni de favoritismos. Eso sí, las sensaciones en uno y otro lado son opuestas. Ilusión y desencanto.
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