La gran noche de Lunin
Hoy cumple 24 y juega su primera final con el Real Madrid. Lleva más partidos esta temporada, que en las cuatro anteriores juntas. Este verano, clave para su futuro
Han sido casi cinco años de oda a la paciencia, pero el día que Lunin llevaba tanto esperando, ya está aquí: jugar una final con el Real Madrid. Y eso que a principios de semana, Courtois amagó con llegar a esta velada y ‘amargarle’ la fiesta. Pero no, Andriy, finalmente, tendrá su doble celebración: porque hoy, además, cumple 24 años. Noche grande para el ucraniano, que lleva más partidos esta temporada (9) que en las cuatro anteriores juntas (hasta este verano sumaba cinco; tres de Copa y dos de Liga). No es fácil compartir posición con Thibaut; un portero imposible de sentar. Y a su inevitable sombra lleva viviendo cinco años. Pero ante el par de lesiones que ha sufrido este curso, Lunin ha tenido que dar un paso al frente. Y está reafirmándose como un guardián de garantías.
Sin embargo, al principio le costó. Aterrizó el verano de 2018 para encadenar tres cesiones: Leganés, Valladolid (interrumpida por falta de minutos) y Oviedo. No fue hasta la tercera, la 2020-21 (ya sin Keylor Navas ni Areola), cuando logró asentarse en Chamartín... para vivir en la penumbra. Su primera temporada sólo jugó un partido (y vaya noche: la dura eliminación copera en Alcoy). Y la segunda (el año pasado), cuatro: dos de Copa y dos de Liga, ya en el tramo final (el derbi en el Metropolitano y la visita a Cádiz). Ese es el resumen: llegó en 2018 y, cuatro temporadas después, sólo sumaba cinco partidos oficiales. Para más inri, le rodeaba una maldición: hasta el octavo partido, no logró dejar la portería a cero.
Courtois, doble KO
Pero esta temporada las cosas están siendo diferentes: Courtois, el hombre que llegó a pasarse tres años sin pisar la enfermería, ya suma dos lesiones. En octubre fue baja debido a una inflamación del sacro (dolor muy agudo en la zona lumbar, debido a una hinchazón que comprime los nervios ciáticos) y ahora, una sobrecarga en el aductor. Por puro decreto, a Lunin le está tocando reencontrarse con las tablas y los cenitales. En octubre jugó seis partidos seguidos, incluido el Clásico en el Bernabéu: Osasuna (1-1), Shakhtar (2-1), Getafe (0-1), Shakhtar (1-1), Barcelona (3-1) y Elche (0-3). Pero volvió Courtois y no reapareció hasta el Cacereño (0-1). Otra vez al banquillo, hasta Mallorca, cuando el belga cayó por segunda vez.
Su gran noche
En estas se encuentra Lunin. De la nada, a portero del Mundial de Clubes. Porque las pruebas médicas descartaron cualquier rotura en Courtois y hasta se sopesó la posibilidad de llegar a esta noche; la final. Pero finalmente se ha decidido no correr riesgos y jugará Lunin. Ya hizo un partido notable en semifinales, reafirmándose como portero de enormes garantías. Ancelotti se fía de sus guantes y hoy, la noche de su cumpleaños, le confiará la portería. Será su 15º partido oficial con el Real Madrid (tres porterías a cero y 12 goles encajados, de momento; uno cada 110′). En el horizonte, las negociaciones sobre su futuro. Acaba contrato en 2024, así que este verano se deberá tomar una decisión: renovar (y seguir viviendo, irremediablemente, a la sombra de Courtois) o salir. Esa es la cuestión.