La defensa, un asunto de fondo
Salvo Gerard Martín y Eric, que varía mucho su posición, Flick espera mejoras individuales de Koundé, Cubarsí, Christensen o el mismo Balde para afrontar con garantías un tramo decisivo del campeonato. Araújo, de viaje espiritual en Israel.


El Barça ha recuperado el buen camino después de la caída en Londres. Cuatro remontadas, cuatro victorias, que le han elevado al liderato de la Liga y le mantienen con opciones de alcanzar el top-8 de la fase liga de la Champions. Hay cosas que han mejorado. En su regreso, Joan García manda en la portería, Pedri ha vuelto, con lo que el fútbol fluye más fácil. Y arriba, Raphinha, Lamine, Bardghji, Rashford y Ferran están dando muchas cosas en ataque. También Olmo antes de lesionarse. Variedad de opciones y facilidad para hacer gol. En ataque, el Barça empieza a parecerse al equipo del año pasado. Pero no todo gira tan redondo en la defensa, que es un asunto que Flick, su staff, e incluso Deco, deben mirar con mucha perspectiva.
Para empezar, la zona de atrás vive con un asterisco: Ronald Araújo, desaparecido desde la mala noche de Stamford Bridge, donde fue expulsado, ha decidido cuidar su salud mental y se ha apartado del día a día del equipo. Ayer voló a Israel para emprender un viaje espiritual. De momento, el club, que sabe tratar estos temas con delicadeza, le ha dado libertad para que se tome el tiempo que considere necesario. Gerard Martín, a quien apenas se veía como un recambio muy puntual para dar minutos de descanso a Balde, se ha elevado como intocable y, a estas alturas de la temporada, es el central más en forma si se obvia el caso Eric Garcia, que ha vuelto a jugar como pivote en el centro del campo y que también alterna en los laterales (en La Cartuja acabó jugando un rato en la izquierda).
Christensen y Cubarsí, los otros centrales, no están al cien por cien. El danés, lastrado por las lesiones, ha jugado poco y no coge ritmo. Flick lo está utilizando de manera muy puntual para cambios de contención en los finales de partido, o simplemente para que dé descanso a futbolistas cargados de minutos. Y Cubarsí está lejos de su cien por cien. Más allá de salir en la foto de algunos goles esta temporada, se le nota algo inseguro. No gana los duelos con autoridad. Flick quiso protegerlo en la rueda de prensa previa al partido contra el Eintracht, pero no termina de ser el jugador sólido e otras épocas. En los laterales, Koundé y Balde también están sufriendo. El primero, héroe contra el Eintracht, se despista con frecuencia y le falta la contundencia del año pasado. Superados sus problemas físicos, Balde ha creciendo durante la temporada, pero el martes cometió un error de concepto defensivo y permitió el 0-1 de Knauff. También tiene deberes.
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Más allá de las mejoras deportivas, el club está atento a la situación de Araújo. Una decisión drástica del uruguayo, si decidera cambiar de aires, obligaría a hacer movimientos y tratar de reforzar una posición que no se reforzó con la marcha de Iñigo. Si se marcha uno de los capitanes, sí que parecería obligado reforzar a la plantilla para afrontar la segunda parte de la temporada con solidez.
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