La base del Oviedo del ascenso repite protagonismo en Primera

El Real Oviedo afronta el tramo decisivo previo al parón con una realidad evidente: pese al intenso verano de movimientos para reforzar la plantilla en su regreso a Primera División, la base del equipo que compite cada semana sigue siendo prácticamente la misma que logró el ascenso. La falta de adaptación de varias incorporaciones, las lesiones y las decisiones técnicas de Luis Carrión, que asumió el cargo tras la destitución de Veljko Paunovic, han devuelto protagonismo a un bloque que ya formó parte del éxito del curso pasado.

Los fichajes, sin impacto decisivo

Los refuerzos del pasado mercado estival estaban llamados a elevar el nivel competitivo del equipo, pero el rendimiento no ha alcanzado las expectativas. Jugadores como Luka Ilic, Josip Brekalo, Eric Bailly o Brandon Domingues no han logrado asentarse en la dinámica de Primera. El caso del francés, llegado del fútbol húngaro, es el más evidente: no ha tenido continuidad y permanece en un rol marginal: solo ha jugado en la Copa.

Tampoco Horatiu Moldovan ha podido discutir la titularidad a un Aarón Escandell que se ha consolidado como una de las piezas más regulares del equipo. Por su parte, Javi López sí ofreció un salto competitivo tras la llegada de Carrión, pero una lesión frenó su crecimiento; ya recuperado, aspira a recuperar su puesto. En el caso de Alberto Reina, su presencia ha sido irregular, aunque la ausencia de Santi Cazorla en la visita al Sánchez Pizjuán podría abrirle la puerta del once. Ovie Ejaria, por su parte, ha alternado titularidades y ausencias prolongadas por problemas físicos. Forés es otro sin sitio: solo recurren a él como solución a la desesperada.

Las excepciones que han respondido

No todo han sido dificultades para las incorporaciones. Salomón Rondón es hoy el nueve de referencia, un rol que mantuvo con Paunovic y que Carrión ha consolidado. En defensa, David Carmo se ha asentado como acompañante de David Costas y es uno de los jugadores más utilizados. Leander Dendoncker completa el trío de fichajes con presencia fija en las alineaciones.

Los pilares del ascenso sostienen al equipo

A pesar de los movimientos realizados en verano, la estructura del once mantiene un acento reconocible. Aarón Escandell se ha convertido en el futbolista más determinante del curso, dando puntos y sosteniendo al grupo en varias ocasiones. En defensa, Nacho Vidal, Costas y Rahim —este último aprovechando la baja de Javi López— continúan como referentes.

En el centro del campo, Santiago Colombatto ha recuperado terreno hasta afianzarse como pieza clave, y Ilyas Chaira aparece con frecuencia en los planes del técnico. Cuando está disponible, Santi Cazorla sigue ejerciendo como referencia creativa en la mediapunta, donde sigue mandando como en sus mjeores tiempos. Viñas es el último de los superbvivientes anclado al once, en su caso en una posición novedosa, tapando la banda.

Asi las cosas, el Oviedo compite con una columna vertebral que ya fue decisiva en el ascenso. El club necesita que las incorporaciones den un paso al frente para que la plantilla ofrezca la profundidad necesaria en el desafío de mantenerse en Primera.

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