Kenedy despide un año negro

No se puede decir que el 2024 de Robert Kenedy haya sido para recordar. O al menos, no en positivo. El atacante brasileño despide un año horrible, en el que apenas ha tenido participación en un Real Valladolid en el que su estatus contractual, con un altísimo salario y una duración de todavía dos años y medio, debería hacer de él un jugador franquicia. Lejos de ello, en términos utilizados en la NBA, su contrato puede ser denominado tóxico, con una ocupación en términos de cómputo de LaLiga de difícil parangón en un club como el blanquivioleta.

En doce meses, Kenedy disputó apenas una docena de encuentros, uno por mes, con un minutaje pírrico de 212 minutos. De ellos, 205 corresponden a la temporada pasada, en Segunda División; fundamentalmente, a la época en la que Paulo Pezzolano todavía tenía esperanzas de sacarle un óptimo rendimiento, acorde al futbolista que un día, hace mucho, fue, y que en Zorrilla apenas se ha visto. Otra muestra de su escasa participación es que solamente gozó de una titularidad, contra el Burgos, el pasado 13 de enero, todavía en la categoría de plata, de entre los 41 partidos disputados en el año natural por el Pucela.

Aquel jugador que fue apenas mostró ligeros esbozos de su fútbol en 2023 y, viendo los primeros meses del curso, va camino de completar el peor de los tres que lleva vistiendo la camiseta del Real Valladolid. Así será, por lo menos, si sale durante el mercado invernal próximo a abrirse, tal y como es intención del club. Lo es ahora como lo fue en verano, cuando se le buscó una salida por activa y pasiva. Sin embargo, a gusto en la ciudad, Kenedy optó por no salir, a pesar de que, en contra de lo que cabía pensar por la resolución del mercado, sí tuvo alguna propuesta de mercados extranjeros, según ha podido saber este periódico.

No quiso, así, reeditar unas negociaciones a las que sí se había abierto en el verano de 2023, cuando llegó a viajar a Grecia para firmar por Olympiakos, que finalmente desestimó su fichaje al considerar que no estaba en óptimas condiciones, algo que el Real Valladolid consideró “una total falta de respeto” y, según el comunicado que oficializó el club, carecía de verdad. Fuera así o no, lo cierto es que el tiempo ha transcurrido y aquel futbolista por quien se le abrió la puerta a un icono de la cantera como Toni Villa sigue sin ofrecer un solo atisbo de que puede ser rescatado, hasta el punto de que Diego Cocca lo dejó fuera de su primera convocatoria.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.