Iván Martín: “El Girona tiene un hueco en el mapa, nos hemos ganado el respeto”

Sus compañeros y Míchel, en la primera vuelta, lo consideraban el gran infravalorado de este Girona y ahora se ha ganado, por números y calidad, estar en el escaparate mundial. Ofertas no le faltan ni le van a faltar en verano. Iván Martín (14-02-1999, Bilbao) charla con AS del sueño de la Champions y por qué no, de las opciones de acabar segundos la Liga. Este sábado, precisamente, reciben al Barça.

Están cambiando al Girona. Ahora tienen fila para entrevistarles...

Desde luego. Ya se ha visto, antes cuando jugábamos contra Real Madrid y Barça llegaba alguna cámara, algún periodista y ahora se llena La Vinya queriendo entrevistarnos. Como sabes, a mí no me gusta mucho el tema entrevistas, pero al final es un gusto porque quiere decir que estamos haciendo las cosas bien.

¿Cómo lleva estar bajo el foco mediático?

Seguimos actuando igual. La verdad que estás tan metido en tu día a día que un poco no te das cuenta, especialmente cuando las cosas van bien. Cuando van mal es más complicado, pero tal y como están saliendo las cosas ahora, todo es más fácil y sigues a lo tuyo. Lo que viene, viene. Sarna con gusto no pica dicen (ríe).

Están a un paso de la Champions. ¿Se acuerda cuando hace un tiempo era un poco tabú hablar de ello para no gafarlo?

No nos gustaba hablar de ello porque no era nuestro objetivo al inicio de temporada. Lo que queríamos era salvarnos, hacer 40 puntos o intentar llegar a los 53 que dijo Míchel para ser el mejor Girona de la historia. Ahora eso sí que ha quedado atrás (bromea). Viendo como nos íbamos posicionando, según pasaba el año, llegó un punto que era inevitable. Nos lo hemos ganado, aunque también le digo que hacia fuera decíamos una cosa y dentro decíamos otra. Creíamos que teníamos nivel para poder entrar en Champions y es lo que estamos luchando, lo que queremos.

¿Se imagina celebrar la clasificación para la Champions tras ganar al Barça?

Sería increíble. Los números están ahí y cada vez estamos más cerca de la Champions. Nosotros vamos a intentar hacer los máximos puntos posibles y no te voy a decir en qué jornada lo podemos lograr porque no quiero gafar nada, y no me gusta, pero creo que lo tenemos cada vez más cerca.

Ha hablado de gafe. ¿Es supersticioso?

Tengo mis cosas (ríe). Superticioso, depende de cómo lo veas porque lo que sí tengo es que ceno y como lo mismo siempre antes de los partidos. El tema de los saltitos antes de entrar o ponerme un calcetín primero (el izquierdo) porque si no parece que vaya cojo. Pero por lo demás, todo normal.

Este sábado reciben al Barça. Ya le ganaron en la primera vuelta, ¿se ve repitiendo?

Siempre digo que somos capaces de ganar en cualquier sitio y perder en cualquier sitio. Hay que tener humildad y trabajo y en este equipo hay mucho de ello. Lo que no queremos es que nos limite pensar qué rival tenemos delante, algo que creo que nos pasó factura cuando jugamos ante el Real Madrid (perdieron los dos partidos de Liga). Pero hemos tenido un año muy regular, con muchas victorias y queremos seguir así.

¿Cree que ya tienen el respeto absoluto por parte de todos los equipos de LaLiga?

Al principio, los rivales nos venían a jugar de una manera que ahora ya no nos vienen. Nos plantean otro tipo de partidos que se nos hacen mucho más difíciles porque se encierran atrás, pero estamos trabajando para ir logrando victorias en esos partidos. Yo creo que sí, el Girona tiene un hueco en el mapa, nos hemos ganado el respeto.

Si ganan al Barcelona les superarán en la tabla y asaltarán la segunda plaza. ¿La Supercopa es otro objetivo?

(Ríe) a ver, poco a poco. Primero la Champions, que eso ya sería un premio gigante, histórico y el que queremos. Pero siendo sinceros, dependemos de nosotros para todo y si ganamos todo, claro que nos meteremos. Pero es difícil porque el Barça va a terminar muy regular y después de la eliminación de la Champions va a querer quedar segundo sí o sí. Va a ser difícil, pero depende de nosotros.

¿Qué partido espera ante el Barça?

Será muy complicado, pero si seguimos haciendo lo que mostramos en casa tendremos posibilidades.

Su temporada está siendo para enmarcar. ¿Cree que está en el mejor momento de su carrera?

Sin ninguna duda, sí. Está siendo una campaña que ni soñada. Pero no solo para mí, sino para todo el equipo. Nadie se esperaba pelear por entrar en Champions. Yo ya sabía que venir aquí, al Girona, era muy bueno para mí, pero no tanto. Además, conocía a Míchel y lo mismo, sabía que me iba a hacer crecer, pero no tanto.

¿Fue una de sus mejores decisiones dejar el Villarreal y fichar por el Girona?

Y tanto. Viendo cómo estamos lo habría firmado con los ojos cerrados. Al final sí que fue un paso difícil salir del Villarreal porque había sido mi casa durante muchos años, pero era una manera de crecer y desde luego que acerté.

Hay equipos de Primera y Europa que tienen su nombre apuntado en la agenda. Aunque usted tiene contrato con el Girona hasta 2026...

Sí y quiero cumplirlo.

¿Cuántas veces se ha imaginado escuchando el himno de la Champions?

Si le soy sincero, últimamente un montón. Me he imaginado ya jugando la Champions. Pero claro, hace años era algo impensable. Cuando estuve en el Mirandés todo salió perfecto y después fui cedido al Alavés para estar en Primera. Pero no acabó de salir del todo bien y volví a ‘bajar’ para firmar por el Girona en segunda. Ahí lo veía muy lejano, pero es que el fútbol me está dando un regalo tras otro y aquí estamos haciendo historia. Es increíble.

¿Ha hecho alguna promesa si se clasifican para la Champions? ¿Qué le dicen sus amigos?

No no, y mejor no diremos nada. A ver si me tengo que rapar la cabeza o algo de eso... y no quiero.

¿Qué culpa tiene Míchel en el éxito de este Girona?

Yo le diría que casi todo. Nos ha hecho mejores a todos. Yo era un listillo y me creía que sabía de todo y Míchel me ha enseñado muchas cosas. Es una pasada de entrenador y no tengo ninguna duda que, sino lo es ya que para mí sí, estará en la lista de los entrenadores Top de Europa.

¿A qué se refiere con lo de listillo?

No, más que nada que yo llegué al Girona como extremo y él me puso de carrilero, centrocampista... me ha enseñado muchas cosas de fútbol. Ayuda que haya sido jugador y es que tiene un trato muy cercano. Me ha hecho mejor jugador y le estaré siempre muy agradecido.

¿Qué le gustaría mejorar?

Bueno, yo soy un poco vaguete y me gustaría ir más al gimnasio. Es algo que siempre está en mi cabeza, pero a la hora de la verdad no sale (ríe).

¿Cree que está haciendo méritos para ir a la Selección?

Eso no lo sé, hay un seleccionador y es el que decide. Hay mucha competencia, aunque la Selección es un sueño para todos los jugadores. Claro que me encantaría ir, sería algo tremendo. Me encantaría. ¿Quién no se ha imaginado, por ejemplo, ser Iniesta en la final del Mundial y marcar ese gol?

Usted es un gran seguidor de Dragon Ball, de ahí su celebración. ¿Qué hace en su tiempo libre?

Soy una persona muy sencilla. Me gusta estar tranquilo e intento desconectar con los videojuegos, los bolos, quedando con amigos...

¿Qué videojuegos tiene?

Jugué mucho al de fútbol, pero creo que está hecho para enfadar (ríe). Por salud mental decidí dejarlo y cambiar al Fortnite, que al fin y al cabo se juega en cuadrilla y me gusta.

Al videojuego de fútbol seguro que se puso a jugar partidos de Champions. El próximo año será en la vida real...

Ojalá.

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